Guerra: Afganistán

“Esta exposición hace dos años era imposible”, argumentó la colega. Un año y unos días, matizaría. Y es que desde el lunes y hasta el 28 de diciembre (23, 24 y 25 cierra) el españolito de a pie que se pase por la calle Alcalá-rotonda Cibeles podrá visitar una exposición, nada menos que en el Cuartel General del Ejército de Tierra, sobre la guerra de Afganistán. Sí, guerra que con Zapatero se revistió de ese buenísimo denominado “x” (misión humanitaria y ausencia de tiros, por ejemplo). Y ahora sabemos que tiros se pegan todos los días.

Con el nombre “Misión:Afganistán” -ya me hubiera gustado el nombre de “Guerra:Afganistán”-, la exposición recoge a través de las fotografías de diversos periodistas (entre ellos, Mikel Ayestarán, de ABC) el día a día durante los últimos once años de los 26.000 militares españoles que han pasado por Afganistán. Entre los momentos no faltan imágenes en Puestos Avanzados de Combate, con armas listas y prestas por si hubiera que disparar: “Despliegue en lo alto de una cota para controlar un valle frecuentado por la insurgencia”, se puede leer en el pie de una fotografía de F. Rosaleny Pardo de Santayana.

Pepe Díaz, el “legionario” Miguel Temprano o Paco Huertas son otros de los fotógrafos que participan en una exposición que guarda un aparte para la colega Mayka Navarro (“El Periódico de Cataluña”) y sus fotografías a tiro de teléfono móvil (e Instagram).

Junto a esta exposición, el Ministerio de Defensa también ha editado un libro con el mismo nombre donde militares españoles dan su testimonio sobre la guerra de Afganistán (perdón, Misión).

Aunque sea años más tarde, y trufado de la incorrección política, el departamento que dirige el ministro Pedro Morenés ha corregido el rumbo semántico de los términos y habla sin tapujos de lo que hay en Afganistán: una guerra, que por cierto queda su tramo más difícil con el repliegue.

Esperemos que el ministro, y ¡por qué no el presidente Rajoy!, cumplimenten esta semana a nuestras tropas con la tradicional visita navideña y de paso les trasladen el afecto y reconocimiento de los españoles por el trabajo, duro y a veces sin recompensa, que realizan en la guerra de Afganistán, país donde han perdido la vida casi un centenar de militares españoles.

Ya saben, visita obligada estas Navidades, pasen y vean.