Unos 1.500 militares españoles, seis buques de la Armada, ocho lanchas de desembarco, diez aeronaves, 91 vehículos y dos compañías de «marines» estadounidenses y «fuzileiros» portugueses se adiestran desde ayer y hasta el próximo 5 de marzo en aguas del golfo de Cádiz, campo de adiestramiento de la Sierra de Retín (Cádiz) y la bahía de Huelva con el fin de poner a prueba las capacidades de desembarco anfibio de las Fuerzas Armadas en esa zona estratégica de España
El ejercicio se llama «Gruflex-20» y fue inaugurado ayer por la ministra de Defensa, Margarita Robles, quien visitó y conoció las capacidades del buque insignia, el portaaeronaves «Juan Carlos I».
Junto a este buque, participarán también los buques de asalto anfibio «Galicia» y «Castilla», el buque logístico «Cantabria», la fragata «Santa María» o el BAM «Rayo».
La fuerza de proyección es un batallón de desembarco de la Infantería de Marina con sus unidades de apoyo.
También participarán aeronaves de la Flotilla de la Armada (helicópteros SH3D-Sea King o AB-212), drones de vigilancia marítima Scan Eagle, seis cazas F-18 del Ejército del Aire, un avión P3M Orión de patrulla marítima.
Además, la celebración de estas maniobras dará oportunidad a que los buques recalen en puertos donde podrán ser visitados en jornadas de puertas abiertas: Almería con el «Juan Carlos I» y la fragata «Santa María»; Algeciras con el BAA «Galicia»; Motril con el BAA «Castilla»; y Cartagena con el BAC «Cantabria».
España