Lo bueno que tiene este blog es su versatilidad, pero nunca imaginé que ibamos a estar hablando de artes marciales mixtas un día cualquiera de julio.
De hecho no, vamos a hablar de comunicación no verbal y etiqueta. Ya hemos hablado muchas veces de la importancia de la vestimenta a la hora de comunicar: de la falta de rigor de Pablo Iglesias cuando se presentó ante Su Majestad el Rey Felipe VI sin corbata, los calcetines arcoiris del primer ministro de Canadá Justin Trudeau o las corbatas rojas de Donald Trump.
Sin embargo ayer Conor McGregor dio un paso más a la hora de desafiar a un rival tan solo con un traje. En jerga, se diría “trollear”.
McGregor es un excéntrico boxeador irlandés que compite en las categorías de peso pluma, peso ligero y peso wéiter que se hizo luchador tras sufrir de bullying cuando era niño por su aspecto de enclenque.
El próximo 26 de agosto McGregor se va a enfrentar en el T-Mobile Arena de las Vegas contra el boxeador más popular (e invicto) de este siglo, Floyd Mayweather. Uno tiene 28 años y el otro 40, y este combate promete ser uno de los más legendarios de la historia y uno de los que más ingresos genere.
McGregor y Mayweather se encontraron cara a cara este martes para la primera parada de su gira de prensa promocional. McGregor llevaba un traje a rayas mientras que Mayweather llevaba una sudadera con capucha que representaba la bandera americana con estrellas blancas en una manga azul en un brazo y rayas rojas y blancas en el otro.
Ya saben ustedes la pasión patriótica que sienten los americanos por sus símbolos y su país. Lo que mucha gente no se dio cuenta en un primer momento es que tras el aspecto atildado del irlandés se escondía un auténtico mensaje basura, y es que las rayas del traje de McGregor estaban compuestas por las palabras “Fuck you” (que te jxxx en español).
Es cierto que todo lo que se mueve alrededor de este espectáculo es precisamente eso, show business, pero el traje de este hombre ha roto todos los esquemas. A saber qué sorpresas se guardan para Toronto, Canadá, Nueva York y Londres antes de que termine su gira.
No se pierdan en el siguiente video sus provocaciones verbales, su manera de sentarse, sus bailecitos desafiantes… desde luego, calentando el ambiente Conor McGregor es campeón mundial.
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