Es un secreto a voces. Londres 2012 es la meta final de Pau Gasol con la selección. La medalla de oro olímpica, su gran obsesión. Su sueño. El último reto que le queda por conseguir después de haber superado con nota todas las barreras del baloncesto español y para el que faltan aún dieciocho meses y una cita de campanillas por el medio: el Europeo de Lituania del próximo septiembre.
Más allá del torneo en sí (en el que España defenderá el oro conseguido hace dos años en Polonia), está el premio que se otorga a los finalistas: dos plazas directas para los Juegos Olímpicos. Un botín que tiene relación directa con las ilusiones de Pau, que podrían verse rotas de golpe si la selección mantiene el nivel del último mundial disputado en Turquía.
Todavía es pronto para que haya una decisión oficial, pero seguro que a estas alturas, Gasol ya tiene decidido qué hará este verano. En Turquía ya se vio que sin él, el conjunto de Scariolo es otro. El de Sant Boi no tiene sucesor natural en el equipo y su ausencia convierte a España en un equipo accesible. Terrenal.
Quizá por eso, el español tendrá que hacer su último «sacrificio», si es que quiere tener opciones de luchar por el oro en Londres. Con él en la pista, la final en el Europeo (del 31 de agosto al 18 de semptiembre) parece una meta asequible. Sin su concurso, habrá que luchar desde el minuto uno, y más, tras ver el grupo que le ha tocado en «suerte» a la selección, con Turquía y Lituania como grandes amenazas, y con Gran Bretaña y Polonia, dos equipos en pleno crecimiento, como malos acompañantes de viaje. A estos, habrá que sumarles otro quinto conjunto, que llegará de la fase previa.
Viendo este panorama, Scariolo y Pepe Sáez deberían comenzar desde ya a convencer al entorno del jugador. Viendo la situación en la Conferencia Oeste (y a pesar de que los Lakers no son líderes ahora mismo), no creo que haya ningún equipo capaz de apartarles de la final de la NBA, lo que llevaría la actividad de Gasol con los angelinos hasta el mes de junio. Así, este sería otro verano sin apenas vacaciones para el catalán. Pero el oro lo merece. Sin Europeo, puede que no haya olimpiada. Él lo sabe mejor que nadie. Seguro que no fallará.
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