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Este fin de semana se disputará un nuevo derbi entre el Real Madrid y el Asefa Estudiantes. Un clásico entre ambos equipos desde hace muchos años, que corrió grave peligro tras el descenso de los colegiales al final de la pasada campaña, solucionado después en los despachos, para regocijo de los amantes del baloncesto.
El de esta tarde (19.00 horas, TVE1) será el partido de liga número 158 entre ambos equipos, con 114 victorias madridistas, un empate y apenas 42 para el Estudiantes. Además, desde que se disputa la Liga Endesa (83-84), el Real Madrid ha ganado 63 de los 97 partidos disputados y esta temporada no conoce la derrota en el torneo doméstico desde que comenzó hace ya nueve jornadas. Con estos números, alguno ya estará afilando las uñas para darme caña en los comentarios y preguntarme porqué narices digo que el Real Madrid no es el favorito. Es lógico, yo también lo haría. Pero seguid leyendo.
La más que posible ausencia de Rudy Fernández, es el primer golpe en contra del Real Madrid, que como ya le ocurrió en Cantú, le cuesta crear juego en ausencia del balear. Se hace terrenal. La espalda, su caballo de batalla durante los últimos años, le ha vuelto a mandar un aviso y toca parar, al menos, una semana, aunque tratándose de Rudy hasta última hora no se sabrá nada.
En cuanto a los números, esa superioridad que históricamente ha sido blanca, queda reducida a la nada si hacemos caso a lo ocurrido en la última década. Ahí, la igualdad es casi total, con 16 victorias madridistas y doce de los colegiales, que, además, han derrotado con claridad al Real Madrid hasta en cuatro ocasiones.
Palizas históricas por más de 20 puntos, como la sufrida en el Raimundo Saporta hace casi diez años (59-84), con Felipe Reyes (17 puntos) siendo clave para el Estudiantes. Paliza que se repitió dos años más tarde, con el mismo escenario de fondo y con protagonistas similares (70-95). La temporada 2004-2005 dejó otras dos derrotas contundentes del Real Madrid a manos de su vecino por más de veinte puntos, aunque se vengó dejándolo fuera de la lucha por el título.
Ahí se acabó el dominio colegial en la década y a partir de entonces las cosas se han normalizado. De hecho, en los últimos diez choques disputados en pista colegial, la igualdad es total y el buen momento que atraviesan ambos hace que no haya un claro vencedor para esta tarde. Se enfrentan los dos ataques más mortíferos de la ACB, con un juego alegre y vistoso, por encima de los 80 puntos.
El Estudiantes cuenta, además, con el máximo artillero de la competición, Carl English, que promedia 20,2 puntos por partido. Frenarle será un reto para los de Laso, cuyo ataque es más coral, con varios hombres que pueden tomar la responsabilidad ofensiva. Visto lo visto, y aunque luego me tenga que comer mis palabras (que quedan escritas y para eso están), no creo que haya un favorito para el derbi, como no lo ha habido en los últimos años, a pesar del dominio absoluto del Real Madrid en la liga. Prepárense a disfrutar y, ya si eso, luego me pueden dar una colleja virtual.
ACB
