A pesar de que astrónomos, físicos y cosmólogos llevan décadas buscándola, nadie ha conseguido todavía encontrar materia oscura, ese «otro» tipo de materia cinco veces más abundante que la convencional (de la que todos estamos hechos) y que resulta necesaria para explicar los movimientos que observamos en estrellas y galaxias.
Ni siquiera sabemos si esa hipotética materia oscura está hecha de partículas conocidas o si por el contrario está formada por algún otro tipo de material exótico aún no observado en nuestros laboratorios. Lo cierto, y de ahí la dificultad para encontrarla, es que la materia oscura, si existe, no emite ningún tipo de radiación que pueda ser detectada por ninguno de nuestros telescopios. Solo sabemos que está ahí
porque ejerce gravedad sobre los objetos que sí podemos ver, y hace que se muevan como vemos que se mueven. Sencillamente, «ahí fuera» no hay materia ordinaria suficiente para explicar esos movimientos.
Esa dificultad hasta ahora insalvable ha llevado a muchos científicos a considerar posibilidades diferentes. Y ahora, un equipo internacional de investigadores ha ido incluso más allá, y asegura haber encontrado nuevas evidencias de que, después de todo, es posible que la materia oscura no exista en absoluto.
Leer AQUÍ el artículo completo
Ciencia