No obstante, los que han impactado más son los dos creadores menos conocidos. A Maxime Simoens ya lo han fichado en el grupo LVMH, donde desde hace exactamente un año le prestan apoyo logístico y financiero, probablemente planeando un futuro común. Simoens, ha arrebatado de cuajo el estilo de Courregès al viejo Monsieur André, revisitándolo a su aire. El blanco con texturas, las botas blancas altas, los conjuntos negros de piel y lentejuelas y los geniales vestidos y abrigos a rayas blancas y negras han creado una colección consecuente. Un espectáculo de belleza en su forma más sencilla y austera.
El otro creador que ha presentado una colección elegante y moderna ha sido Rabih Kayrouz, libanés recién nombrado caballero de las artes y las letras por el gobierno francés. A los sencillos pero impecables conjuntos crema, a los de cuadros y a los vestidos de color cobre, solo los superan los modelos de noche largos en raso negro. Intemporales.