Mucho se esforzó Angélica Rivera, la mujer del presidente de Méjico, en su visita a España este año. Para nada le ha servido. Su corrección y su réplica absoluta del estilo de la entonces todavía Princesa Letizia, se ha difuminado.
Sus imágenes en una revista de moda en Méjico, eran más dignas de una modelo de pueblo de los años 70 o de una vedette del Folies Bergère que de una primera dama.
En una polémica sesión de fotos, la Gaviota, como la llaman por su exitosa serie de televisión, desplegaba muslamen y caderón con la pierna hacia un lado. Se supone que es un reportaje benéfico… pero a los mejicanos no les ha resultado serio y están que trinan.
En otra imagen, aparecía sentada en pose más bien de 9 semanas y media, sugerente y coquetona. Y para más inri, cuela a una de las hijas de su anterior matrimonio en el reportaje.
Pero lo peor es que la revista en cuestión titula el reportaje “Redefiniendo el Poder Femenino”. Si la nueva versión del poder consiste en ser más mujer objeto que hace dos décadas, más vale que dejemos las cosas como están.
P.D: Teniendo en cuenta que representa a Méjico en el extranjero y que es la mujer del presidente, quizás debería revisar su registro. Como decía Santa Teresa: Cuando perdiz, perdiz. Cuando rosario, rosario.