“Hermès impone a sus socios comerciales un tratamiento ético a los cocodrilos. Visitamos todos los meses a nuestros proveedores”. Aunque los cocodrilos nos den más miedo que pena, la afirmación suena curiosa y parece que este toque de Jane Birkin mejorará la vida de los reptiles.
Aparentemente, Jane Birkin no podrá obligar legalmente a Hermès a cambiar el nombre del modelo de bolsos, ya que lo registraron en 1997. Y, evidentemente, la mayor parte de los Birkin que se venden, no son en cocodrilo ni lagarto, sino en piel vacuna, lisa o impresa.
La asociación PETA, ha felicitado públicamente a la cantante y actriz británica por su intento. Y en Hermès piensan seguir utilizando el mismo nombre en un bolso que declaran claramente inspirado en la actriz: todo un bajonazo de glamour saber que la validez de la historia que la maison francesa contaba sobre el bolso, es agua de borrajas.