«El futuro ha llegado. Esta partida es ciencia ficción». La reacción del gran maestro Paco Vallejo, el mejor ajedrecista español de la historia, no es exagerada. El programa AlphaZero ha destrozado a uno de los mejores programas informáticos de ajedrez, que a su vez es capaz de machacar a cualquier humano, incluido Magnus Carlsen. Lo más increíble de su victoria, aplastante hasta límites impensables (28 a 0 en un duelo a cien partidas, con 72 tablas y ninguna derrota), es que el nuevo prodigio de inteligencia artificial aprendió a jugar solito, en 24 horas y sin ayuda humana. Por primera vez, hablamos de un programa de inteligencia artificial real, que no mueve a partir de algoritmos creados por el hombre. La comunidad ajedrecística no sale de su asombro. Hay que ver la partida a la que se refiere Vallejo y, una vez recuperados de la impresión, tratar de comprender lo ocurrido.
Las máquinas son muy superiores a los mamíferos jugando al ajedrez. Eso lo tenemos superado, aunque todavía hay posiciones muy concretas en las que nos podemos vanagloriar de «comprender» mejor la esencia del juego. Los duelos entre monstruos de silicio, por otro lado, suelen ser equilibrados entre los mejores, con tres programas como bestias imbatibles: Stockfish, Komodo y Houdini. Entre ellos dirimen casi todos los torneos especializados. En ese contexto, la irrupción de AlphaZero en un mundo tan especializado (ya lo hizo en el juego del go y en el shogi) es algo asombroso. Que gane era impensable, que lo haga con esta suficiencia es revolucionario e increíble. (Mientras escribo esto, sigo rastreando la historia en busca de un origen humorístico). De momento, solo se han publicado diez partidas, que muestran a un jugador de otro planeta. Otro aspecto en lo que es radicalmente distinto es su limitada rapidez de cálculo, apenas 80.000 posiciones por segundo, frente a los 70 millones de Stockfish. Es el abandono de la fuerza bruta.
Hace unas semanas, conocíamos la historia de un joven prodigio, Max Deutsch, que se había marcado la meta de profundizar en varias disciplinas. Una e ellas era el ajedrez y la culminación de su experimento consistía en un encuentro con el campeón del mundo, para ver si podía ponerse a su nivel en solo un mes y resistir al menos unos asaltos. ¿Puede un cerebro genial superar a otro tan especializado como el de un gran maestro? La respuesta, evidente, es que el chaval no tenía nada que hacer contra Carlsen. Leonardo da Vinci era único, pero también perdería contra él.
Pues bien, lo que ha hecho AlphaZero es exactamente eso. Como Capablanca, ha aprendido a jugar sin ayuda, ha pulido su juego practicando contra sí mismo, como Fischer, y se ha sentado frente a Stockfish para darle una lección que promete revolucionar el ajedrez. Si hasta ayer los programas nos ayudaban a orientarnos en este juego casi infinito, en el que los humanos vamos casi a ciegas (aunque bien armados con nuestra intuición), quizá lo que estábamos aprendiendo no era tan correcto. De entrada, parece que al nuevo genio le gusta sacar la dama a pasear en cuanto puede, contradiciendo uno de los consejos más viejos y repetidos.
Avance científico histórico
Puede que estemos ante el gran descubrimiento científico de nuestra era. (Es difícil no exagerar también desde aquí). «Si tenemos éxito», dicen los creadores de AlphaZero, creemos que este es uno de los más importantes y beneficiosos avances científicos nunca hechos, porque incrementa nuestra capacidad de entender los misterios del universo y abordar algunos de nuestros desafíos más apremiantes en el mundo real. Desde el cambio climático a la necesidad de una atención médica radicalmente mejorada, demasiados problemas sufren un progreso dolorosamente lento, su complejidad abruma nuestra capacidad para encontrar soluciones. Con la inteligencia artificial como multiplicador del ingenio humano, esas soluciones estarán a nuestro alcance». Hasta hace poco todo esto parecía la habitual palabrería. Después de ver las partidas de AlphaZero, quizá veamos el futuro antes de desaparecer.
Detrás de AlphaZero, por cierto, está la empresa Deep Mind, creada en Londres en 2010 y comprada por Google en 2014. Los padres del invento son el doctor Demis Hassabis (ex niño prodigio del ajedrez), Mustafa Suleyman y el doctor Shane Legg.
El estudio completo que explica cómo funciona esta nueva maravilla de la inteligencia artificial se puede leer y descargar en este enlace.
En el duelo con Stockfish, por cierto, AlphaZero logró 25 de sus 28 victorias con blancas y solo tres con negras. Lo más reseñable sigue siendo que no perdió ni una. El ritmo de juego era de un minuto por jugada.
Críticas de Nakamura
En Chess.com preguntaron a los diez participantes del London Chess Classic y el más crítico fue el estadounidense Hikaru Nakamura, que consideró el duelo «deshonesto», ya que Stockfish necesita su libro de aperturas para jugar a su mejor nivel (por lo visto no fue utilizado). «Estoy bastante seguro de que ni siquiera Dios podría lograr contra Stockfish el 75 por ciento de los puntos con blancas sin ciertas ventajas», añadió con sorna.
El GM Larry Kaufman, consultor del programa Komodo, añadió que espera ver al nuevo programa en otras máquinas, sin las ventajas que ofrecen los propios ordenadores de Google.
Partidas
La partida a la que se refiere Vallejo es un poema, en especial el sacrificio de caballo en h6 de la jugada 19. Tampoco está mal el movimiento Dh1, en la jugada 26.
AlphaZero-Stockfish 8
1.Nf3 Nf6 2.d4 e6 3.c4 b6 4.g3 Bb7 5.Bg2 Be7 6.O-O O-O 7.d5 exd5 8.Nh4 c6 9.cxd5 Nxd5 10.Nf5 Nc7 11.e4 d5 12.exd5 Nxd5 13.Nc3 Nxc3 14.Qg4 g6 15.Nh6+ Kg7 16.bxc3 Bc8 17.Qf4 Qd6 18.Qa4 g5 19.Re1 Kxh6 20.h4 f6 21.Be3 Bf5 22.Rad1 Qa3 23.Qc4 b5 24.hxg5+ fxg5 25.Qh4+ Kg6 26.Qh1 Kg7 27.Be4 Bg6 28.Bxg6 hxg6 29.Qh3 Bf6 30.Kg2 Qxa2 31.Rh1 Qg8 32.c4 Re8 33.Bd4 Bxd4 34.Rxd4 Rd8 35.Rxd8 Qxd8 36.Qe6 Nd7 37.Rd1 Nc5 38.Rxd8 Nxe6 39.Rxa8 Kf6 40.cxb5 cxb5 41.Kf3 Nd4+ 42.Ke4 Nc6 43.Rc8 Ne7 44.Rb8 Nf5 45.g4 Nh6 46.f3 Nf7 47.Ra8 Nd6+ 48.Kd5 Nc4 49.Rxa7 Ne3+ 50.Ke4 Nc4 51.Ra6+ Kg7 52.Rc6 Kf7 53.Rc5 Ke6 54.Rxg5 Kf6 55.Rc5 g5 56.Kd4 1-0 You must activate JavaScript to enhance chess game visualization.No me resisto a publicar esta otra partida. La jugada 21 Ag5 es sencillamente alucinante. Mueve el alfil a una casilla protegida por un peón y además no parece amenazar nada. Mientras, el negro ya disponía de f5, que efectivamente hará, amenazando a la dama y dos piezas blancas a la vez.
AlphaZero-Stockfish 8
1. d4 Nf6 2. c4 e6 3. Nf3 b6 4. g3 Bb7 5. Bg2 Be7 6. O‑O O‑O 7. d5 exd5 8. Nh4 c6 9. cxd5 Nxd5 10. Nf5 Nc7 11. e4 Bf6 12. Nd6 Ba6 13. Re1 Ne8 14. e5 Nxd6 15. exf6 Qxf6 16. Nc3 Nb7 17. Ne4 Qg6 18. h4 h6 19. h5 Qh7 20. Qg4 Kh8 21. Bg5 f5 22. Qf4 Nc5 23. Be7 Nd3 24. Qd6 Nxe1 25. Rxe1 fxe4 26. Bxe4 Rf5 27. Bh4 Bc4 28. g4 Rd5 29. Bxd5 Bxd5 30. Re8+ Bg8 31. Bg3 c5 32. Qd5 d6 33. Qxa8 Nd7 34. Qe4 Nf6 35. Qxh7+ Kxh7 36. Re7 Nxg4 37. Rxa7 Nf6 38. Bxd6 Be6 39. Be5 Nd7 40. Bc3 g6 41. Bd2 gxh5 42. a3 Kg6 43. Bf4 Kf5 44. Bc7 h4 45. Ra8 h5 46. Rh8 Kg6 47. Rd8 Kf7 48. f3 Bf5 49. Bh2 h3 50. Rh8 Kg6 51. Re8 Kf7 52. Re1 Be6 53. Bc7 b5 54. Kh2 Kf6 55. Re3 Ke7 56. Re4 Kf7 57. Bd6 Kf6 58. Kg3 Kf7 59. Kf2 Bf5 60. Re1 Kg6 61. Kg1 c4 62. Kh2 h4 63. Be7 Nb6 64. Bxh4 Na4 65. Re2 Nc5 66. Re5 Nb3 67. Rd5 Be6 68. Rd6 Kf5 69. Be1 Ke5 70. Rb6 Bd7 71. Kg3 Nc1 72. Rh6 Kd5 73. Bc3 Bf5 74. Rh5 Ke6 75. Kf2 Nd3+ 76. Kg1 Nf4 77. Rh6+ Ke7 78. Kh2 Nd5 79. Kg3 Be6 80. Rh5 Ke8 81. Re5 Kf7 82. Bd2 Ne7 83. Bb4 Nd5 84. Bc3 Ke7 85. Bd2 Kf6 86. f4 Ne7 87. Rxb5 Nf5+ 88. Kh2 Ke7 89. Ra5 Nh4 90. Bb4+ Kf7 91. Rh5 Nf3+ 92. Kg3 Kg6 93. Rh8 Nd4 94. Bc3 Nf5+ 95. Kxh3 Bd7 96. Kh2 Kf7 97. Rb8 Ke6 98. Kg1 Bc6 99. Rb6 Kd5 100. Kf2 Bd7 101. Ke1 Ke4 102. Bd2 Kd5 103. Rf6 Nd6 104. Rh6 Nf5 105. Rh8 Ke4 106. Rh7 Bc8 107. Rc7 Ba6 108. Rc6 Bb5 109. Rc5 Bd7 110. Rxc4+ Kd5 111. Rc7 Kd6 112. Rc3 Ke6 113. Rc5 Nd4 114. Be3 Nf5 115. Bf2 Nd6 116. Rc3 Ne4 117. Rd3 You must activate JavaScript to enhance chess game visualization.
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