Cuando nacemos, según en el lugar en el que lo hayamos hecho, se genera una identidad, un conjunto de rasgos propios de un individuo o de una colectividad que nos caracterizan frente a los demás. En ese lugar podemos desarrollar la vida, o en cualquier momento de ella, se puede dar el caso que se tenga que abandonar, por mucho tiempo, el lugar de nacimiento, y por tanto, se puede perder o incluso llegar a adquirir una nueva identidad en una nueva tierra.
Emigrar por causas de fuerza mayor es una de las peores causas a las que se puede enfrentar un ser humano. Tener que dejar tu lugar de origen sin tu quererlo, provoca en las personas un sentimiento que les marca de por vida. Además de tener que salir, la persona se tiene que enfrentar a otra batalla: la de adaptarse al nuevo lugar que recala, sin amigos y sin saber el idioma.
Marjane Satrapi lo reveló de forma contundente en su gran obra gráfica Persépolis. La obra que fuera galardonada con el Premio autor revelación Angoulême en 2001 y con el Premio al mejor guion en Angoulême 2002, ahora la editorial Reservoir Books la edita de nuevo con una nueva traducción, un nuevo formato, con una mejorada rotulación y un nuevo diseño de la publicación.
Por todos es sabido la historia que comienza en 1979, poco antes de la Revolución islámica iraní, en la que la propia Marjane fue testigo y es la protagonista de su obra; una pequeña niña de diez años, nacida en una familia de tendencia progresista en Irán. A partir de ahí relata los acontecimientos de una vivencia en una época que le tocó vivir y que sigue de actualidad. Desde la atmósfera que reina en el país a principios de la revolución iraní, un proceso de movilizaciones que desembocaron en el derrocamiento de la Dinastía Pahlaví bajo el sah Mohammad Reza Pahleví en 1979 (quien tenía el apoyo de Reino Unido y Estados Unidos), y que significó la instauración de la República islámica actualmente vigente en Irán. El líder de la revolución fue el ayatolá Jomeini, quien tuvo apoyo de varias organizaciones de izquierdas e islámicas, más los movimientos estudiantiles iraníes mientras estaba en el exilio, revelando las tensiones dirigidas por el ambiente muy politizado de la época.
En un principio la Revolución fue entendida como democrática, que traería un país libre e independiente de las influencias de los gobiernos occidentales y daría así a un lugar libre y tolerante. Pero no fue así. Cada acontecimiento que marca la vida de la pequeña niña se inscribe en el telón de fondo, que es la historia de un país como Irán. Marjane no entiende lo que sucede a su alrededor. Sus padres hablan sobre materialismo dialéctico y mártires. Su maestra dice que el Shah es divino. Ella misma quiere convertirse en profeta. Entonces se refugia en Dios y lee todos los libros que puede.
Luego el Shah es derrocado, y un nuevo régimen islámico toma el control. Todas las escuelas son de un solo género, se ve obligada a usar un velo y la imagen del Shah se arranca de su libro de texto. Los amigos de sus padres, Siamak y Mohsen, son liberados de la prisión. Ella conoce a Anoush, su tío a quien ama de inmediato. Él le cuenta historias sobre estar en prisión y en Rusia. Sin embargo, lentamente, Marji y sus padres se dan cuenta de que el régimen no es mucho mejor que la monarquía que lo precedió. Todos los que apoyaron la revolución ahora son enemigos del gobierno. Los eventos que siguen son increíbles y, a veces, horribles, como la guerra entre Irak e Irán.
Marjane está en plena adolescencia; su madre la tuvo que enviar a Viena, a casa de unos conocidos de donde tiene que irse bruscamente, sin haber sido avisada, para instalarse en un internado católico. Después de algún tiempo encerrada, Marjane se va del internado furiosa, víctima de una injusticia y encuentra alojamiento en casa de un médico. Entre tanto, conoció a nuevas personas, y empezó a integrarse, pero sin aceptarse por completo e incluso negando a veces sus orígenes.
Después de cuatro años de ausencia, nos reencontramos con Marjane en Teherán; estamos en 1988. La guerra contra Irak ya terminó pero el país está en ruinas y el régimen sigue tan represivo como antes, intenta seguir su vida en el hogar donde nació, siguiendo las convicciones sociales, pero no resultaron, por lo que tuvo que volver a emigrar. Marjane abandona definitivamente Irán y se va a Francia, donde vive desde 1994.
Un relato que está a la orden del día, por eso es bueno releerlo si no se ha leído esta extraordinaria novela gráfica publicada originalmente hace 20 años. Toda una narración gráfica de carácter histórico costumbrista, que muestra la conciencia que una persona o colectividad que tiende a ser ella misma y distinta a las demás y que busca el hecho de ser alguien o algo por sí misma.
Los dibujos de una línea clara, casi caricaturesca, no le quitan rigor y contundencia a la historia, todo lo contrario, transmiten toda esa angustia y miedo a lo que tuvo que enfrentarse una pequeña niña, reflejando la inocencia de una Marjane en este mundo horrible acompañada de unos personajes dinámicos y realistas. El libro se mueve a un ritmo rápido, lo que casi le da vértigo al lector haciendo que se lea del tirón, sin poder parar de pasar páginas, provocando un efecto intelectual muy estimulante.
En definitiva, Persépolis es una memoria histórica e inquietante, absolutamente increíble, llena de felicidad, dolor y momentos de la infancia en un mundo donde todos los niños se ven obligados a crecer y tener que sufrir la transformación a una persona adulta, acompañado de esas imágenes sencillas, que de alguna manera transmiten una gran profundidad de emoción y peso gráfico. Los contrastes entre la luz y la oscuridad son muy efectivos en la comunicación de los mensajes, en esa reconstrucción vivida de recuerdos y hechos que van hacia delante tejiendo de forma contundente en el tapiz del recuerdo y lleno de matices vitales que se desarrollan en lugares donde ocurren desventuras, tropiezos y amores en los que la memoria se entremezcla con la literatura gráfica y el poder de las palabras en una soberbia y pautada medición visual y narrativa. Un clásico asentado de la novela gráfica contemporánea.
En 2007 se estrenó la película basada en la novela gráfica, dirigida por Vincent Paronnaud y producida por Xavier Rigault y Marc-Antoine Robert. La película obtuvo una nominación a la Palma de Oro y consiguió el Premio del jurado en el Festival de Cannes 2007. También consiguió el Premio Especial del Jurado en el Festival Internacional de Cine Cinemanila, un Goya y en el año 2008, fue nominada a Mejor película animada en la entrega de los Oscar.
