Ángel González Abad el 14 dic, 2016 Tiene Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) una fijación especial con la Tauromaquia, pero no contra todo lo que incluye tan amplia manifestación cultural, sino solo contra una parte. Anda el dirigente de ERC Alfred Bosch desde sus tiempos de diputado en el Congreso queriendo convencer a las instituciones europeas de las supermillonarias subvenciones públicas que anualmente recibe la Fiesta. Hasta 571 millones de euros cifra Bosch la cantidad que cada doce meses sale de las diferentes administraciones, incluida la Unión Europea, y va a parar a la Tauromaquia. Y se equivoca de plano su señoría, pues si esta cantidad fuera exacta, los problemas del toreo, que los tiene, estarían solucionados. Pero además se olvida quien debería tener el cumplimiento de la ley como objetivo en su quehacer político y personal, que la Tauromaquia es por ley patrimonio cultural. Y que si las subvenciones llegaran, que no llegan, sería con el mismo derecho que cualquier otra actividad cultural, y además, por si nadie se lo ha dicho, las administraciones españolas están obligadas a su promoción. La Fundación Toro de Lidia ha salido al paso del informe de ERC y replica que únicamente el 0,16 por ciento de los datos están documentados, además de importantes errores de bulto como la afirmación de que toda actividad taurina esta subvencionada en un 33 por ciento. Claro que pedir ahora a Esquerra que acate la ley, y objetividad a la hora de emitir un informe que tiene su punto de mira en el extranjero, es algo utópico. Y menos que trate todo lo relacionado con la Fiesta de una manera honrada. Casualidad, sin duda, que en los datos del informe de Bosch no se haga mención a los festejos populares, ni a los miles que se celebran en toda España ni por ende a los que tienen lugar en Cataluña. Casualidad también que estos festejos estén blindados aquí desde el mismo día en que el Parlament prohibió las corridas de toros. Casualidad que antes, también desde Esquerra, se quisiera comprar la Monumental a sus propietarios a cambio de terrenos edificables, y más casualidad aquello de igualar las corridas con el maltrato a mujeres, ancianos y niños, y hasta con la ablación. Del sector taurino depende que las falacias de ERC queden en evidencia. Toros Comentarios Ángel González Abad el 14 dic, 2016