Ángel González Abad el 12 may, 2015 Esta semana han vuelto los rumores sobre una inmediata resolución del Tribunal Constitucional al recurso contra la prohibición de las corridas de toros en Cataluña. Nuevos rumores, y van… Los mismos que hace un año, que dos, que tres, que cuatro, que son ya los que tarda el TC en resolver algo que uno se imagina no debe ser tan complicado técnicamente hablando. El Parlament vota contra la celebración de las corridas de toros en territorio catalán en base a una modificación de la ley de protección de los animales y el PP recurre esa decisión. Lo que hay que determinar es si esa decisión fue tomada dentro de los límites constitucionales o no; si se vulneran las competencias o no; si va contra el libre mercado o no; si se cercena la libertad de los aficionados o no. Y para eso, más de cuatro años tarda ya el Constitucional en decidir. Me parece mucho tiempo, demasiado. Otra cosa es que en todo este tiempo se haya esperado un buen momento político para dar a conocer el dictamen, pero convendrán conmigo que desde 2010 pocos momentos idóneos se han dado para soltar una hipotética sentencia contra la prohibición que votó el Parlament. Los momentos han sido uno peor que otro… En los últimos días han vuelto los rumores sobre un fallo inminente, que para los políticos puede que sea una arma arrojadiza en sentido de ida y vuelta, pero que para los aficionados es una necesidad, la tabla de salvación para la ilusión de un colectivo que sueña con volver a vivir la afición heredada de sus mayores. Y ahí no hay política que valga. Dicen que el TC va a sentenciar sobre el recurso contra la abolición. Que sentencie, que es lo que esperan desde ya va para cinco años los miles de aficionados catalanes que en la resistencia han mantenido la dignidad de la Fiesta. Dicen que el Constitucional va a sentenciar, que sea ya. Toros Tags CataluñatorosTribunal Constitucional Comentarios Ángel González Abad el 12 may, 2015