Carmen de Carlos el 17 jul, 2008 De vacaciones en Asturias descubro la derrota del Gobierno argentino en el Senado. Finalmente, fue el vicepresidente, Julio Cobos, el que le puso el cascabel al gato de las retenciones móviles de Cristina y de Néstor Kirchner. Se dio un escenario previsto en este blog: empate entre los senadores a favor de la subida de impuestos a las exportaciones de grano las dichosas retenciones- y los que las rechazaban.Cobos, a la sazón titular de la Cámara Alta, lo resolvió con su voto y le dio la puntilla al proyecto oficial. Pido perdón si me equivoco, que la historia me juzgue, dijo. Me imagino el desconsuelo de la Presidenta y de su consorte. El matrimonio había planteado la cuestión de las retenciones móviles como una cuestión de vida y muerte, de ser o no ser, de democracia o dictadura, de razón o sin razón, de estás conmigo o estás contra mí. Conocido su mal perder, identificados con una pila de rencor, en expresión porteña, los Kirchner, atragantados con el fracaso, deben estar mascullando su venganza. Cobos lo sabe y el resto, también. Política Tags cobosjuliomovilesretenciones Comentarios Carmen de Carlos el 17 jul, 2008