Globos sonda

Definitivamente, a ‘Volver’ le ha salido un lobanillo. Por desgracia para Pedro Almodóvar, este año se le han cerrado casi por completo las puertas a los grandes premios americanos al optar a ellos junto a alguien como Clint Eastwood, que podría dar un campanazo histórico al ganar el Oscar a la mejor película y el Oscar a la mejor película en lengua no inglesa de una misma tacada (no creo que ocurra, pero podría). Pedro Almodóvar conoce el mundo en el que vive y sabía que nadie le esperaba a la entrega de Globos; y no fue. Los Oscar es otra historia, y aunque ya sospeche que sus acciones han bajado mucho, supongo que no se perderá la ocasión de perder un Oscar, que siempre tiene su atractivo. Penélope Cruz, lástima, tiene también las papeletas contadas, aunque es igualmente una chica lista y sabe que el hecho de tener alguna papeleta es mucho.

De todos modos, se pueden vislumbrar varias luces tras estos Globos de Oro:

• Una muy, muy potente es ‘Dreamgirls’, la película de Bill Condon con Beyoncé y Eddie Murphy, que algunos que ya la han visto me han comentado que es la bomba, y así lo corrobora su pasada por los Globos. Ha de pasar ya como una de las favoritas, junto, claro, a ‘Babel’
  
• Parece muy evidente que a Hellen Mirren no será fácil que le quiten el Oscar, ni llamándote Meryl Streep (cuidado con ella: cuando ve pasar un Oscar cerca, lo coge, y en la comedia esa de ‘Prada’ da un recital de cómo se compran papeletas para ganar un Oscar)
  
• Que una nominación para Penélope Cruz sería, visto lo visto, un triunfo.
  
• A Forest Whitaker no le quitan el Oscar ni tirando entre muchos. Su trabajo en ‘El último rey de Escocia’ en el papel de Idi Amin promete ser estremecedor.
  
• No parece que Mel Gibson vaya a ser competencia en el Oscar a la mejor película en lengua no inglesa para Clint Eastwood. Quedan más en segundo plano todavía ‘Volver’ y ‘El laberinto del fauno’. Pero no debemos pensar que hay nada raro en que compitan películas como la de Eastwood o Gibson en ese apartado, pues ya ellos, al hacerlas así, asumen unos riesgos y unas evidentes pérdidas de mercado (los americanos va a ver películas subtituladas con tanto recelo como yo a la danza); una nominación a ese Oscar ‘extraño’ no les vendrá mal.

De todos modos tendremos tiempo de hablar de los Oscar cuando sepamos quienes aspiran a ellos.