Intentaré rebajar un poco los humos eruditos que hay en el blog con un asunto menor, pero mayor… Aunque no es que pretenda de esto ‘un espacio sin humos’. Pronto tendremos la ocasión de saber si Scarlett Johansson es una actriz mediocre, tal y como podría pensarse por el modo con el que hasta ahora construye sus personajes (con una cansina distancia, sin volcarse, sin dar más que eso que no puede ocultar: todo el exabrupto de su físico), o si por el contrario hay en ella una actriz solemne agazapada y a la espera de saltar sobre su pieza. Tal vez esa aparente desgana interpretativa sea sólo producto de la moda o de su edad, aunque, en todo caso, con esa abulia consigue darle profundidad, inquietud y cierta intriga a sus papeles. Bueno, digo que pronto tendremos ocasión de comprobar todo esto y por partida cuádruple. Estará con Neil Jordan en ‘Borgia’, aunque sobre todo estará con Christopher Nolan en ‘The Prestige’ (que no tiene nada que ver con barcos hundidos, la ‘felonía’ pepera y el pancartismo psoero); también interpretará a una amante de Napoleón en ‘Napoleon y Betsy’ y en una comedia romántica que se titulará ‘The Nanny diraries’. Es decir, que del hartazón de Scarlett podremos tal vez traspasar su armazón y ver qué hay allí dentro. De todos modos, ya sabéis: aquí si se quiere fumar se fuma y el que venga con humos, bienvenido es.