Solari sigue la estela de Zidane en todos los conceptos. Es inteligente del trato con la prensa, ofrece de la sonrisa ante toda polémica y no se enfrenta a nadie. Las críticas duras las hace con la sonrisa por montera y ahora ha firmado su contrato por el Real Madrid sin pedir ni un euro. Le pagan lo que el club ha estipulado. Lo mismo hizo el francés en 2016, aquel 4 de enero, cuando Florentino Pérez le ofreció ser el sucesor de Benítez.
SolarI, como Zidane, sabe que lo más importante de su carrera es triunfar. Pensar en cobrar ahora mucho dinero significa que tienes una visión muy corta de tu posible trayectoria como técnico. Quien solo piensa en el dinero nada más llegar es que sabe que su carrera va a ser corta o nunca será triunfal. El argentino, como el francés, lo primero que quiete es trabajar bien, conseguir los retos y demostrar que puede ser un entrenador de gran nivel. Después las ganancias llegarán por añadidura. Así lo hizo Zidane.
Solari ha comenzado muy bien y deja vestigios de que puede ser un entrenador importante para el Real Madrid, porque conoce la idiosincrasia y el carácter de la casa en la que priman la discreción y la eficacia.
Otros temas
