El fútbol inglés no comprende este surrealismo de Buñuel. En Inglaterra se respeta a los profesionales más que en ningún sitio, especialmente a los campeones. Aunque la prensa actual de la isla no respete a nadie y se invente fichajes e intereses, el mundo del fútbol sí respeta a los jugadores. Y los aficionados de los clubes de la Premier con los que hablamos no entienden, por ejemplo, que se cuestione a Keylor Navas cada dos semanas.
Los futbolistas ingleses tampoco comprenden esa búsqueda constante de un portero para relevar al costarricense. Ha ganado dos Champions y siempre está en la diana. Eso no sucedería en Inglaterra. El portero madridista supera esa falta de respeto con más trabajo.
Una cuestión es que se busque un cancerbero de futuro para dentro de dos años, cuando Keylor se acerque a los 33 años, y otra es cuestionarle en cada temporada con un recambio. No se respeta al futbolista en España. Solo a algunos consagrados. Y el costarricense, dolido, trabaja y trabaja. Ahora se recupera de la lesión de aductores que sintió tras realizar un gran partido frente al Tottenham en el Bernabéu. Kane le felicitó por sus paradas, porque salvó al Real Madrid, y el precio que paga es ver cómo le colocan sustitutos.
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