ABC
| Registro
ABCABC de SevillaLa Voz de CádizABC
Blogs Tiro al blanco por Tomás González-Martín

De Xabi a Di María, cuestión de pubis

Tomás González-Martín el

El siete de enero se reunieron en el Bernabéu y el ocho firmaron la renovación por dos temporadas más. La continuidad de Xabi Alonso en el Real Madrid es un ejemplo de cordura. El futbolista nunca ha dado un problema al club. Es objetivo en sus intereses y en los de la empresa que le paga. Nunca pidió más dinero. Si en 2009 firmó un contrato por cinco temporadas, no entendía el guipuzcoano esa táctica habitual de solicitar más emolumentos a mitad de camino. Hace dos años se le subió el salario unilateralmente, por parte del Real Madrid, porque se valoró que se lo merecía. Hay que respetar lo que se rubrica y el jugador nunca lo solicitó, ni se quejó. Ahora, en dos días ha renovado con la casa blanca. Los datos de su nuevo convenio los negoció Iñaki Ibáñez con José Ángel Sánchez y en poco tiempo alcanzaron el acuerdo.

Cobrará cinco millones por campaña. Y Xabi se centrará en el Real Madrid para conseguir esos títulos que se persiguen. Ganó la Copa del Rey en 2011. Conquistó la Liga y la Supercopa de España en 2012. Ahora, Alonso anhela la Décima y otra Liga, sin olvidar el torneo copero. Su firma le permite dedicarse a rendir en el Madrid y acabar con las especulaciones de su futuro.

Xabi se operó del pubis en junio y superó bien la intervención. Ha vuelto a jugar bien. Por eso tardó en decidir su porvenir. Quería probarse en el campo. Reapareció el 30 de octubre. Y ha rendido.

La pubalgia trajo de cabeza a Xabi durante años, hasta que tomó la postura de pasar por el quirófano. Di María se agarra a la parte baje del pubis para mostrar su enfado por los silbidos del público. El club ha decidido no imponerle una sanción grave. Pero está advertido. El argentino debe centrarse en el Real Madrid y no desconcentrarse con cantos de sirena de su representante, Eugenio López. Debe actuar en positivo. Jugar en positivo. Eliminar esos pensamientos negativos que surgen de su presunta puesta en el mercado. Pero al club no ha llegado ninguna oferta. Y Di María afirma que nunca quiso irse. Entonces ¿a qué jugamos? Será mejor que juguemos al fútbol y solo al fútbol.

Otros temas
Tomás González-Martín el

Entradas más recientes