ABC
| Registro
ABCABC de SevillaLa Voz de CádizABC
Blogs Por Tierra, Mar y Aire por Esteban Villarejo

Generación Afganistán

Generación Afganistán
/JAIME GARCÍA
Esteban Villarejo el

Nos vamos de Badghis y de la base «Ruy González de Clavijo» en Qala i Nao. Misión cumplida en el lugar de «mayor fatiga» del despliegue español en Afganistán, país al que nuestros militares llegaron en enero de 2002. Aquí os dejo un texto publicado el pasado 28 de abril en las páginas de ABC sobre esta nueva generación de militares españoles surgida en Afganistán.

En ese reportaje por primera vez se observa una imagen de una habitación de soldados españoles en una GUERRA que sufrió una política de comunicación muy restrictiva hasta hace dos años y que fue radicalmente cambiada  por el ministro Pedro Morenés (todo hay que decirlo).

Alguna vez he debatido con soldados, suboficiales y oficiales sobre el hecho de una nueva generación de militares españoles surgida en este conflicto lejano y con el más exigente teatro de operaciones (en Afganistán el famoso «general Invierno» se sustituye por el «general Orografía») al que probablemente se han enfrentado nuestras tropas en los últimos decenios.

 

Un soldado español, en la Ruta Lithium a su paso por Sang Atesh / JAIME GARCÍA

 

Nuestros militares son reacios a hablar de esa «generación Afganistán», prefieren hablar de la «misión» con sus características, objetivos, rutinas y preparación específica. Nada de subrayar lo especial o el hecho diferenciador. Profesionalidad y titulares para la prensa, que dirían. Pero quizás por el cambio vertiginoso de las comunicaciones, quizás por el cambio radical en el modo de hacer la GUERRA (UAV, PRT, CIMIC,…, términos que salen de la doctrina de esta misión) o quizás porque en Afganistán se han perdido un centenar de vidas, esta misión que cumple sus plazos de repliegue marcará para siempre la historia moderna de nuestros Ejércitos y Armada.

Aquí os dejo el texto, con fotos de Qala i Nao durante nuestra estancia a finales de abril con el contingente Aspfor XXXII, liderado por el Regimiento de Infantería Ligera «Príncipe» Nº 3. Y, sí, para mí a partir de ahora siempre habrá una GENERACIÓN AFGANISTÁN:

 

Militares de Aspfor XXXII en la base de Qala i Nao, tras llegar de una misión de patrulla / JAIME GARCÍA

 

«Afganistán ha parido una nueva generación de militares españoles. Es la más difícil, compleja y exigente misión que han afrontado nuestras modernas Fuerzas Armadas: combates con fusil de asalto en el valle de Piwar, la vanguardia a -24ºC en Golo Jirak, la conducción evasiva tras la explosión del suicida en Kabul, el tramposo IED (artefacto explosivo improvisado) en la Ruta Lithium o el ataque a bocajarro del propio afgano al que adiestran, siempre con desconfianza, en Herat.

Son militares curtidos en la GUERRA. En mayúsculas ahora que se puede contar, porque no siempre fue así. Y es que en Afganistán nuestros militares también lidiaron con el silencio y el debate político. “¿Es una guerra?”, se interpelaba a menudo a su señoría ministra/o siempre temerosa/o ante la incomprensión de una sociedad no acostumbrada a llamar a las cosas por su nombre.

 

Desmantelamiento del puesto de combate avanzado de Golo Jirak, a -24ºC el pasado invierno / PIO ASPFOR XXXII

 

¿Es una guerra?, preguntamos durante nuestra convivencia de 17 días con las tropas españolas. “En las operaciones se ha combatido con la insurgencia”, reconoce sin ambages el coronel de la base de Qala i Nao, Fernando García González-Valerio, cuyo contingente está a punto de regresar. De los 1.150 efectivos desplegados, tan solo permanecerán en diciembre unos 350 en Herat y 50 en Kabul. A partir de 2015 la OTAN decidirá otra misión menos numerosa y centrada en el asesoramiento a las fuerzas afganas.

En una de las camaretas de la base es donde percibimos la esencia de esa nueva generación militar. Son el cabo Moreira (28 años, Cangas de Narcea) y los soldados Nozal (24, Granada) y Betolaza (30, Oviedo), del Regimiento de Infantería Ligera “Príncipe” Nº3 de la BRILAT. Los tres sufrieron la semana pasada un ataque con lanzagranadas RPG en la Ruta Lithium. “En el impacto de la primera granada sentimos un gran movimiento en el blindado. Humo y una explosión. Cuando comenzamos a movernos recibimos una segunda granada en el lateral”, describe el soldado Nozal.

“Se pegan tiros, sí. Unos pocos tiros se pegan”, asienten en su habitación. Los fusiles apoyados en un lateral. Cascos y chalecos antibalas. Alguna revista, una bandera de España en la litera. “Aquí la vida es como en la calle, con unos te llevas mejor que con otros”, asiente el cabo Moreira.

 

El cabo Moreira, en primer plano, y los soldados Betolaza (izq. con ordenador) y Betolaza en su camareta en la base de Qala i Nao /JAIME GARCÍA

 

Los tres pasaron la mayor parte de su misión en Afganistán en el puesto de combate avanzado de Ludina, cedido a las fuerzas afganas. Allí llegaron a dormir 19 personas en una tienda: “Culo, picha, culo, picha…”, cuenta otro sargento.

La soldado Tamara Marquínez (26 años, Gijón) es una de las patrulleras del convoy que lidera el teniente Sergio Casla (36 años, Madrid) por la calle central de Sang Atesh. Concentrada, flanquea al teniente en su proceder con oficiales del Ejército afgano.

“Aquí no te puedes fiar ni de ellos”, reconoce en una loma en plena Ruta Lithium el cabo Fernando Diego (27 años, Pola de Siero). Los AK-47 o M-16 de los uniformados afganos pueden volverse en su contra, son los denominados ataques “green on blue”, una de las principales preocupaciones de las fuerzas de la OTAN.

 

La soldado Tamara Marquínez / JAIME GARCÍA

 

“Para mí Afganistán es esa otra familia. Está la familia de sangre y esa otra familia con la que derramas sangre”, comenta el teniente Casla antes de subirse al RG-31. Para el sargento Cascón Afganistán también es la misión más dura: “Con tiros, con un enemigo real que hostiga”.

“¡¡Último mes!!”, reza uno los carteles de la cafetería de la base. “Ahora más que nunca: concentración, disciplina, sacrificio, atención, responsabilidad, compañerismo. El último esfuerzo antes de volver a casa. Del pasado, honor. Del presente, orgullo”, prosigue el cartel. Para el futuro, generación Afganistán. La guerra más difícil, en la que España ya ha perdido un centenar de vidas».

Tiradora, en el acceso a la base de Qala i Nao / JAIME GARCÍA

 

Cuando Medina del Campo está a 7.357 kilómetros / JAIME GARCÍA

 

 

Miembros de Aspfor XXXII en Qala i Nao/ JAIME GARCÍA
Internacional

Tags

Esteban Villarejo el

Entradas más recientes