Las manchas son unas molestas “inquilinas” que, una vez que se instalan, se resisten a abandonarnos. Y las peores, son las denominadas melasmas (cloasmas, velo o paño de embarazada) porque, además de al sol, están ligadas a problemas hormonales (embarazos, anticonceptivos, terapia hormonal sustitutiva en la menopausia, alteraciones tiroideas…) o medicamentos. Por eso requieren un abordaje desde muchos frentes (láser, peelings, mascarillas despigmentantes..), y es complicado borrarlas con un solo tipo de tratamiento o para siempre
Pero este otoño se presenta esperanzador. Las investigaciones avanzan y algunos médicos tienen nuevas armas para combatirlas.
1- Láser de picosegundos. Es la novedad que han implantado en el Grupo de Dermatología Pedro Jaén, mi dermatólogo de culto. El láser Picosure estaba inicialmente creado para eliminar tatuajes, porque tiene la ventaja, de que emite su energía en un periodo de tiempo mucho más corto (picosegundos) que el de sus predecesores, y esto facilita que se rompan las partículas de pigmento sin hacer daño a la piel de alrededor. Además, las rompe en porciones mucho más pequeñas, lo que facilita su eliminación en el organismo. “Esta eficacia en la destrucción del pigmento y la preservación de los tejidos circundantes es la que ha hecho que este láser se posicione como el mejor tratamiento para esta clínica para acabar con léntigos solares (hasta los mas claritos se eliminan fácilmente), melasma (técnica muy utilizada en EEUU), e incluso las ojeras pigmentadas (que hasta la fecha, no tenían tratamiento eficaz)”, cuenta la doctora Natalia Jimenez, la especialista que lo maneja. Está en vía de investigación, pero promete…
2- Suplementos nutricionales. Según la doctora Katy Eftekhar, las últimas investigaciones han demostrado que la aparición de los melasmas puede estar relacionada también con déficits nutricionales de hierro y complejo de vitamina B, además del estrés. “Son muchos los estudios que han demostrado que las disfunciones en las fases de desintoxicación hepática causan una mala conversión de los estrógenos en el hígado, lo que puede provocar la aparición de cloasma”, asegura. Y nos cuenta los suplementos que tienen efectos demostrados en la prevención de este “velo”:
+Indol-3 carbinol: presente en crucíferas vegetales (repollo, coliflor, nabo, coles de bruselas, o brócoli). Evita la aparición de los metabolitos tóxicos que causan la producción y oxidación de melanina.
+Pycnogenol: potente antioxidante que se extrae de la corteza del pino marino. Aporta flavonoides y proantocianidinas que destruyen los radicales libres.
+Complejo vitamina B: principalmente B3, B6, B9 que junto con un complejo mineral de zinc, manganeso, selenio y cobre desintoxican el hígado.
+Cardo mariano: la silimarina, componente principal del cardo mariano, actúa directamente sobre las células hepáticas mejorando sus funciones.
+Vitamina C: potente antioxidante que además atenúa las manchas, sobre todo, en personas con mucho estrés.
3- Intraterapia Lesionar. Este nombre tan rimbombante esconde un tratamiento tan simple como unas infiltraciones de sustancias despigmentantes directamente en el corazón de las manchas. El doctor José Vicente Lajo Plaza, afirma que saltándose la barrera de la epidermis, e infiltrando directamente en la dermis, se consigue eliminarlas sin el daño o agresividad de los peelings tradicionales. “En los tratamientos de peeling o láser, tenemos que decapar y desestabilizar la barrera epidérmica para poder penetrar hasta la mancha. Con este sistema, dejamos la epidermis intacta. Lo que hacemos es utilizar principios activos que sabemos que previenen la sobreproducción de melanina – bien en el ciclo de la tirosinasa o bien directamente sobre la mancha preestablecida – o que van a eliminar los depósitos de melanina ya fabricada y depositada en la piel”. ¿Más ventajas? Al no afectar la epidermis, es compatible con el sol por lo que se puede realizar en verano o en épocas de esquí; el resultado es más visible en menos tiempo (a los 10–12 días de la 1ª sesión –se requieren 3 o 4-, la mancha se ve más clara); y se puede combinar con o peelings o cremas despigmentantes.
4- Mesoterapia con ácido tranexámico. Las doctoras Mar Mira y Sofía Ruiz del Cueto están realizando un ensayo clínico pionero sobre unas inyecciones de ácido tranexámico, con el que están vendo mejores resultados que con todo lo que habían probado hasta la fecha. Este activo tiene su origen en medicina general hospitalaria donde se utiliza para controlar hemorragias. Y desde hace unos años, diversos estudios médicos internacionales (sobre todo asiáticos) han demostrado su eficacia, a nivel tópico, para las pieles hiperpigmentadas. Lo aplican en mesoterapia facial+ suplementos orales que incluyen el mismo activo. “Lo que estamos consiguiendo con este ensayo clínico (a priori 1 sesión a la semana durante el primer mes y quincenal durante 2 meses) supone un gran avance en medicina estética, ya que a partir de ahora va a ser posible prevenir la pigmentación inducida por ultravioleta, la síntesis de melanina y la melanogénesis en un porcentaje mucho más alto que con técnicas anteriores”, señalan. Aunque todavía no han finalizado el estudio, las primeras conclusiones son muy satisfactorias:
+En todos los casos ha habido una respuesta positiva al tratamiento: la respuesta mayoritaria está entre ‘buena’ y ‘muy buena’.
+Se está comprobando que es efectivo para tratar el melasma, en combinación con otros tratamientos o solo, según el caso.
+También se está demostrando que es una gran alternativa para fototipos oscuros que responden mal al IPL.
+Y también puede ser una eficaz terapia médica para evitar repigmentaciones.
A lo largo de este mes de septiembre concluirán el estudio y tendré a las doctoras en mi programa de EsRadio/Libertad Digital, donde nos revelaran datos definitivos.
CONTINUARÁ…
Tratamientos