El Dr. Zaiac, el gurú del “botox”, ha creado una línea de dermocosmética eficaz y asequible.
El célebre Martín Zaiac, jefe de dermatología del Hospital Mount Sinaí, es una eminencia en cáncer de piel y en láser y para mí, además, es Modigliani “dibujando” rostros.
A este médico, pionero en inyectar toxina botulínica con fines estéticos en EEUU, lo conocí porque viene tres días al trimestre al Instituto Médico Estético (que dirige Maribel Yébenes) para planchar las arrugas de cientos de pacientes “first class” españolas, que hacen cola para ponerse en sus manos. Es un as del botox, y por su consulta en Miami también desfilan todas las celebrities de medio mundo.
Pero la toxina no es su única especialidad. Este director de la Universidad de Medicina, así como profesor de la Universidad de Ciencias Médicas Barry, conoce más que nadie las necesidades de nuestra piel. Su trabajo no es solo frenar las marcas que el tiempo deja en ella, es también prevenir y tratar sus enfermedades y problemas.
Y como los productos que hay en el mercado no le convencían del todo, decidió crear una línea que lo hiciera. Para ello se asoció con otras dos eminencias científicas, con currículos tan rimbombantes como el suyo: el Dr. Eduardo Weiss, director del departamento de Dermatología del Centro Hollywood de Miami, profesor de la Nova South Eastern Universidad y de la Universidad Miami Center; y el Dr. Francisco A. Kerdel, que acaba de ser nombrado Presidente de la I.S.D. (Sociedad Internacional de Dermatología) y es jefe de dermatología del hospital Universitario de Miami y profesor de dermatología en la Universidad de Medicina de Pisa, además de asesor científico de muchos dermatólogos de E.E.U.U. Méjico, Bolivia, Chile, Argentina, India, Inglaterra, Francia, España, Portugal, Italia, Japón…
Estos 3 especialistas lo tenían muy claro. “Nuestros conocimientos científicos acerca de los orígenes del envejecimiento de la piel aunados a la práctica, desde hace tantos años, de solucionar problemas de nuestros pacientes y mejorarles su apariencia física, nos permite saber aplicarlo a la cosmética”.
Dicho y hecho
Después de 3 años de investigación, sus pócimas de belleza (elaboradas en EE.UU. por los laboratorios Quintessence con avanzada biotecnología suiza) colman sus expectativas de cuidado, protección y visible rejuvenecimiento de la epidermis.
¿La receta? Combinan un péptido de acción parecida a la del botox (reduce el movimiento facial debido a la paralización de los músculos), con extractos de células madre de una manzana suiza (que resiste más que ninguna a la oxidación del aire), y una gran innovación científica (y primicia en España): las células madre de extracto de uva de Borgoña.
Es sabido que las células madre de la capa basal de nuestra piel son muy valoradas pero no abundan (sólo representan entre el 2 y el 7%). Esta uva borgoñesa consigue alargar de forma muy notable el ciclo de vida de las células madre de nuestra piel, y aumentar su capacidad de regeneración en un 80%.
¿El tratamiento básico para una piel joven, sana y protegida? Aplicarse el Sérum Bioactivo de Efecto Lifting de Rejuvesse MD (69€) y 2 ó 3 minutos después, la Emulsión Facial Bioactiva de Rejuvesse MD (79€). En las patas de gallo, Gel Contorno de Ojos Rejuvesse MD (59€) antes de acostarse y por la mañana, con ligeros toques
Los estudios clínicos demuestran que después de 2 meses las arrugas se reducen en un 45% de media.
Pero eso no es lo que me ha convencido de Rejuvesse (¿quién hace los estudios?). Lo que me hace confiar en esta línea es que, si los doctores Zaiac, Kerdel y Weiss se han metido en esto, es porque están segurísimos de su efectividad.
Tres dermatólgos con ese prestigio, no se la juegan por unos cuantos euros.
Se venden en institutos médico estéticos, en algunas farmacias y en la web: www.rejuvesse.es
Maquillaje
