A cinco días para el cierre del mercado en la NBA, los rumores sobre posibles traspasos van en aumento. Una deriva lógica a medida que se acerca la hora límite. Ese 15 de marzo que está marcado en rojo en el calendario de Pau Gasol como el final de lo que se ha convertido en una pesadilla para él.
Una vez asumido que los Lakers le han puesto en el mercado, al español ya nada le quita el sueño. Lleva tanto tiempo viendo su nombre en las quinielas de traspasos, que ha optado por mantenerse al margen y centrarse en la cancha a la espera de los acontecimientos. No le quita nada el sueño, tal y como demostró ayer, cuando parecía que su fichaje por los Rockets era inevitable. “Me he dormido una hora y cuarto”, reconocía el español al LA Times. “Me dije, que si algo tenía que ocurrir, me llegaría una llamada de alguien importante, pero no hubo nada”, apuntó Gasol, que luego fue clave en el triunfo de los Lakers ante los Timberwolves.
Con la perspectiva del tiempo, lo que en un principio parecía un paso atrás para Gasol, se ve ahora como uno adelante. La descomposición que viven los Lakers desde que ganaron el anillo en 2010 aconseja una salida y cualquier destino parece bueno, incluso los Rockets, que hace unos meses sonaban a chiste, lo son. “No he pensado en ello. No me importa”, insiste Pau.
Mientras Gasol sigue a la espera de novedades, Bryant continúa con su cruzada a favor del español. “Adoro a Pau. Es muy duro verle pasar por todo esto. Me encantaría poder hacer algo”, apuntaba el escolta angelino, que siempre ha demostrado su apoyo a Pau. La estrella angelina confía en que pase cuanto antes esta semana y centrarse en rearmar al equipo. “Creo que mis compañeros estarán más aliviados si juegan sin ese peso encima”, señala Kobe a cinco días del cierre de traspasos.
La última oferta que los Lakers han tenido sobre la mesa ha sido insuficiente para Kupchak. Scola, Kevin Martin y Goran Dragic a cambio de Gasol. Un trato que no le sirve a los angelinos, que quieren en el paquete a Kyle Lowry.
NBA Emilio V. Escuderoel