En los cuatro días que llevamos de Feria en Zaragoza, los toros han salido claramente vencedores frente a los de luces. Los de Cebada Gago, la de Peñajara y la De Ana Romero en el lado ganadero frente a la faena vibrante de Paulita al torrente de embestidas santacolomeñas del día 7 de octubre.
Ayer, la desigual corrida de Martelilla, toda cinqueña, también ofreció el triunfo a los toreros al menos en tres de los ejemplares lidiados, y en el lado contrario una solitaria oreja para un entusiasta Juan de Álamo con el tercero. Este ejemplar, con seis años, tuvo casta y ganas de embestir y el salmantino anduvo enrazado, aunque dejó el poso de que el toro viejo y agradecido se fue al desolladero sin exprimir.
Bueno también el sexto, y más templado con él Del Álamo, sobre todo con la muleta en la derecha.
El tercero toro bueno fue el templado que hizo quinto, al que un desdibujado Julio Parejo dejó pasar.
Y, mientras tanto, Antonio Nazaré, el más esperado del pobre cartel, no tuvo opciones. Una lástima. Ahora a esperar la goyesca del martes 9.
Toros