Contina este verano de crisis. Crisis de libertad. Una corona de espinas pende desde el 28-J en el Parlamento de Catalua. La temporada estival ha quedado sellada por la prohibicin de los toros. Sobre un atad han escrito polticos de escasa casta y sobrada mansedumbre el nombre ms valioso: Libertad. Los aficionados han reivindicado su espacio en las arenas de la Monumental de Barcelona. Su voz ha recorrido toda la piel de toro: desde Pontevedra, la joya gallega que los Lozano mantienen en lo ms alto, peas como El Urgente clamaban respeto para tan arraigada tradicin; en Las Ventas, Alicante, Sevilla, Huelva... Y durante la celebracin de festejos populares como el de Puebla de Alcocer,catalanes recin aterrizados en Extremadura no daban crdito el pasado fin de semana al hachazo a la libertad.Los profesionales buscan ahora la unin para velar por una Fiesta utilizada como arma poltica en la Comunidad de Montilla, la misma que no oculta su hipocresa al tratar de blindar los correbous para no perder el manantial de votos de las tierras del Ebro. El toreo debera haber puesto antes el cascabel a este gato...Aunque no ser sencillo bracear entre el oleaje abolicionista, la Fiesta sigue muyviva en esta piel de toro agrietada por la corriente independentista. Suma y sigue la temporada en medio de una prohibicin de alargada sombra delibea...