Entre aterrados y sorprendidos los caraqueños se asoman a sus ventanas para ver el sobrevuelo rasante de helicópteros rusos y aviones Sukhoi como si estuvieran viendo la escena de una película de guerra en tiempo real que no dan crédito a sus ojos.
Nadie les ha dicho que el imperio vaya atacar, que los marines van a desembarcar en el valle de la ciudad, que hay guerra en el horizonte como para justificar su presencia. Para su tranquilidad, las naves rusas están sobrevolando los cielos de la capital venezolana desde el lunes pasado para calentar los motores de cara a la celebración del 20 aniversario del golpe de Estado que dio el comandante Hugo Chávez el 4 de febrero de 1992.
En las maniobras aéreas participan unos doce helicópteros de diferentes tamaños y calibres: MI-25, MI-35 y MI-17, además de los cazas Sukhoi 30, que ha comprado el gobierno de Chávez a los rusos. La factura armamentista asciende a unos 11.000 millones de dólares, que incluye además misiles, tanques y fusiles kalashnikov.
Lo que critican los venezolanos es el alto endeudamiento que ha adquirido el gobierno por la compra de armas mientras los hospitales colapsan por falta de insumos sanitarios, falta vivienda y se dispara la criminalidad que el año registró más de 19.000 homicidios.
También preocupa la poca calidad del armamento ruso. De los 44 helicópteros rusos comprados ya se han estrellado más de cinco en los que han muerto unos 27 oficiales venezolanos. Las autoridades no han dado una explicación del por qué fallan esas aeronaves.
Pero lo que más desconcierta es el uso que se le da a ese armamento. El costo es demasiado alto como para destinarlo a festejar un cruento golpe de Estado, que además fue derrotado, ¿celebrar un golpe fallido?, se preguntan en la red de Twitter, como si fuera una fecha patria.
Obviamente el mandatario está haciendo con el desfile militar una demostración de fuerza y una apología de su intentona para justificar la violencia, que sus adversarios condenan y repudian. Por más que celebre su golpe más se le recuerda que fue golpista.
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