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“Una temporada atípica”

Nos guiamos por la empatía

“Una temporada atípica”
Javier Esteban en una Cena del Coordinador
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Javier Esteban es el Director del Departamento de Deporte Escolar y Valores (DEyVV) de Escuelas Católicas de Madrid (ECM) y lleva en la institución desde septiembre de 2003, en total 17 temporadas de las 31 de existencia del campeonato.

Periodista (P): Cuando entraste como coordinador de árbitros, ¿imaginaste alguna vez tener que gestionar una situación como la que estás viviendo en los XXXI Juegos Deportivos?

Entrevistado (E): Esta es una temporada atípica, tan atípica como que no se han podido concluir los campeonatos de Madrid; ni celebrar los Juegos Nacionales Escolares EMDE, previstos para junio, en los que estaban inscritos 54 equipos de ECM e involucrado el equipo de DEyVV en su organización; ni llevar a cabo los Juegos Internacionales FISEC, que se iban a disputar en Duisburgo en julio y a los que acudían Calasancio y San Luis de los Franceses entre otros colegios de España.

P: ¿Cuándo fuisteis conscientes de la gravedad de la situación?

E: Tomamos conciencia la semana previa al 8 de marzo, de hecho la primera medida que tomamos, de la cual algunos de dentro y de fuera se mofaron por excéntrica, fue la de no realizar el saludo Fair Play antes de los partidos para intentar que los contactos fueran los mínimos y que por lo menos no fueran propiciados por la Organización. Esta medida se aplicó desde el 5 de marzo. De hecho, a la par, no antes, algunas competiciones FIFA o FIBA evitaron ese mismo contacto de diversas formas.

P: ¿Si erais tan conscientes del riesgo, por qué se celebró el VII Campeonato de Judo de ECM el 8 de marzo, el mismo día que se celebraron distintas manifestaciones de otra índole por toda España?

E: Pues las razones realmente fueron dos. La primera es que por aquel entonces se hablaba de que el riesgo estaba en concentraciones masivas y aunque bien es cierto que por el campeonato pasaron casi 1000 judocas, lo hicieron divididos en siete franjas horarias, lo que suponía unos 142 por horario, no una excesiva concentración. A pesar de ello evitamos que las autoridades que entregaron las medallas besaran o dieran la mano a los niños, haciéndoles solo la reverencia judoca. La segunda razón por la que la Federación Madrileña de Judo, ECM y el resto de entidades deportivas no suspendimos la actividad ese fin de semana es porque no teníamos ninguna información de las autoridades sanitarias, ni ninguna orden del gobierno regional, ni del nacional que la prohibieran. ¿Si no, tú crees que hubiéramos puesto en riesgo la salud de los participantes y la nuestra propias?

P: ¿Qué más medidas se tomaron desde ECM antes del confinamiento que empezó el 14 de marzo o de la suspensión de clases que se inició el 11 de marzo?

E: Pues la supresión del saludo Fair Play el 5 de marzo y la suspensión temporal de los Juegos Deportivos ECM el 9 marzo con la consiguiente cancelación de la Cena del Coordinador del 2 de abril, en el ámbito local. En el ámbito nacional se comunicó el 3 de marzo que en caso de suspensión siempre se devolvería íntegra la cuantía de participación a los colegios inscritos y así fue. Por último, en el ámbito internacional, en común acuerdo con la Federación Internacional del Deporte de la Enseñanza Católica (FISEC), el 12 de marzo se suspendieron los Juegos FISEC.

P: ¿A partir de ese momento cómo ha ido actuando el DDyVV?

E: En primer lugar hemos ido elaborando distintos escenarios para terminar la competición a renglón de los decretos del Gobierno de España, en total tres hipotéticos desenlaces, hasta llegar a la conclusión, tras encuestar a los centros, recopilar información sanitaria de primer línea, recibir los consejos de especialistas de la educación física, atender a las opiniones de psicólogos y sociólogos, y observar la evolución de las medidas gubernamentales, de que debíamos cancelar los juegos. Propusimos esta cancelación al Secretario Regional y al Consejo de Dirección de ECM antes de Semana Santa, comunicándose la cancelación definitiva oficial el 17 de abril, siendo de las primeras instituciones en hacerlo, casi empatados en el tiempo con la Federación de Baloncesto de Madrid.

P: ¿Por qué dices empatados en el tiempo, era una carrera, había alguna necesidad de ser los primeros?

E: Te respondo primero a lo de empatados en el tiempo, es cierto que coincidimos en el tiempo con esa entidad, ellos un día antes, pero la diferencia fue que nosotros hablamos de compensar a los colegios con las partidas presupuestarias ahorradas por la no celebración de las restantes jornadas y eventos del campeonato, incluso se hicieron públicas las cantidades a bonificar y su origen.

Respecto a la necesidad de ser los primeros, creo que no había ninguna, pero nosotros nos guiamos en este proceso por la empatía, por la necesidad de ponernos en la piel de administradores, directores, coordinadores y familias de los centros. Por ejemplo, entendimos a la perfección que una familia, por mucho que se hubiera levantado el estado de alarma a finales de abril, no iba a dedicar todos los fines de semanas restantes del curso a la competición cuando el temor iba a sobrevolar las canchas, las carencias económicas en algunos casos iban a impedir apuntar al niño a la extraescolar, la prioridad iba a ser centrase en el curso académico o la necesidad de visitar a los familiares abandonados por la cuarentena iba a acuciar.

P: ¿Y ahora qué, si no hay campeonatos de ningún ámbito, a qué dedicar el tiempo de trabajo?

E: Muy sencillo, seguir nuestra misión, visión, valores. Misión, acompañar a las instituciones en lo que al ámbito del deporte se refiere. Visión, prestar servicios que facilitan la respuesta a las comunidades educativas. Valores, entre otros, el trato personalizado, asesoramiento, compromiso e implicación institucional y conocimiento transversal.

P: ¿Y eso en la aplicación práctica del día a día cómo se traduce?

E: Se traduce en que cada día ponemos la banda sonora del confinamiento, una canción con mensaje positivo que se sube a la web de ecmadrid.org y se publica en Twitter; cada día hacemos lo propio con tests de baloncesto, futsal y voleibol para que los jugadores, delegados y árbitros no se desenganchen de la competición; cada día felicitamos el santo del día por Twitter; y cada día acercamos temas de interés para los coles mediante el blog abcnclase, por ejemplo uno muy bonito fue el de los árbitros que son enfermeros y están en primera línea de la lucha contra el COVID19 o recomendaciones de películas o de libros con argumento deportivo y que aportaban ideas para matar el tiempo libre propio del confinamiento. En definitiva, como decía Jesús Alcoba, en estos tiempos las instituciones deben “comunicar y comunicar”.

P: Para terminar, dime qué planes hay para el curso que viene.

E: Esa es la otra parte de nuestro trabajo actual. Esta crisis nos va a obligar a cambiar de manera inmediata y a largo plazo. Por ello estamos barajando, entre otras medidas, el mantener el número de jornadas para la próxima temporada, pero empezando un poco más tarde, como hacíamos hasta hace dos años, en noviembre, a fin de dar tiempo a que el virus esté más controlado, la situación más normalizada y, ojalá, a que tuviéramos la vacuna para esa fecha, pero te garantizo que seguimos y seguiremos pensando en fórmulas que permitan el que haya XXXII Juegos Deportivos de Escuelas Católicas de Madrid y lo más atractivos posibles para los participantes.

FELIPE MARRÓN

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