Una semana más, seguimos conociendo a fondo a los integrantes de diferentes colegios y entidades que hacen posible y participan de los Juegos Deportivos de Escuelas Católicas de Madrid. En esta ocasión nos atienden Luis Sanz y Alberto Sanz, entrenadores de los equipos femeninos de fútbol sala del colegio Nuestra Señora del Recuerdo. Los dos hermanos, que esta temporada han dirigido a los equipos “A” y “B” del colegio de la Compañía de Jesús, nos cuentan sus impresiones en esta nueva manera de vivir debido a la cuarentena.
“Nos estamos adaptando a las nuevas circunstancias debido a esta crisis sanitaria”, cuentan los entrenadores, que aseguran estar cumpliendo las medidas e intentando llevarlo lo mejor posible. “Afortunadamente estamos bien tanto nosotros como las jugadoras”, expresan. Como la mayoría de los entrevistados anteriores, ante una situación así, echan de menos la normalidad y valoran lo que la rutina no les permitía hacerlo. “Se valora mucho más todo lo que antes podíamos hacer sin preocupación y dando más importancia a los pequeños detalles”, cuentan Alberto y Luis.
Para ellos, dos personas muy apasionadas por el fútbol sala, con una larga trayectoria en diferentes equipos y colegios durante más de quince años, el parón ha supuesto una nueva oportunidad de, en palabras textuales de ellos, “reflexionar, mejorar y aprender”. “La pandemia ha originado nuevos formatos a través de internet, como charlas, coloquios y exposiciones de profesionales que comparten conocimientos y experiencias”, cuentan. “Se pueden sacar aprendizajes de gran ayuda”, aseguran los dos entrenadores del Recuerdo.
Para ellos, la decisión de suspender la temporada en los Juegos ECM es “de sentido común”. “Se han seguido los protocolos marcados por Sanidad, imperando la seguridad de todos”, asegura. Hay que reconocer que se trataba de una gran temporada para los dos equipos de fútbol sala femenino dirigidos por Alberto y Luis, puesto que se habían clasificado como primeras y terceras para la fase por el título. “En lo deportivo, nuestro equipo “A” había quedado líder consolidado en la primera fase pese a contar con dos generaciones dentro del mismo equipo”, cuentan. “Por otro lado, el “B”, siendo un equipo muy joven, estamos muy satisfechos con su rendimiento”, asegura.
Más allá de lo deportivo, Alberto y Luis destacan la actitud de sus jugadoras. “Lo que más valoramos es el progreso y aprendizaje de las chicas, sus ganas de mejorar y su compromiso de seguir en este deporte año tras año”, aseguran. Una de las claves de ese progreso es la competición, igualada y con un gran ambiente pese a ser pocos equipos. Así explican ellos la esencia de esa liga, compuesta por once equipos a lo largo de este curso. “La competición busca la mejor forma de reducir las diferencias de edad, que sea más igualada y los equipos jueguen más partidos con los de nivel más similar”, cuentan.
De esta manera, Luis y Alberto disfrutan como entrenadores después de una larga trayectoria llevando equipos de chicos. “Entrenar a equipos femeninos nos ha supuesto una nueva motivación. Intentamos aportar nuestro granito de arena en el crecimiento del fútbol sala femenino en el ámbito escolar, compartimos un hobby y seguimos vinculados al mundo del deporte, enseñando valores”, expresan ambos.
Y en estos años como entrenadores del colegio Ntra. Sra. del Recuerdo, Alberto y Luis han tenido la oportunidad de participar en los Juegos EMDE de Torremolinos. “Han sido unas semanas muy divertidas, una experiencia inolvidable para los grupos con los que hemos ido”, cuentan. “La suspensión, como la de los Juegos ECM, es la lógica debido a la situación”, explican. Pese a ello, creen que iniciativas como seguir otorgando el premio Fair Play pese a haber concluido ya la temporada, o la opción de tener una portada de periódico como foto de recuerdo, se agradecen. “Es una bonita manera de cerrar esta temporada tan extraña”, aseguran.
Iván Hernández
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