Gema Lendoiro el 01 jul, 2014 ¿Hemos crecido creyendo que Maléfica era la mala?¿ Pues resulta que mala es, claro, pero porque alguien se encargó de anular su corazón convirtiendo la bondad en maldad, la esperanza en desánimo, el amor en odio y la venganza en su forma de vida. Ayer llevé a doña Tecla al cine. Era la primera vez en su vida. Escogà Maléfica, de la siempre poderosa factorÃa Disney porque desde bien pequeña esa señora le ha gustado mucho a ella. No en la pelÃcula de la Bella Durmiente, que no la tenemos, sino un cuento bastante cutre en dibujos que tenemos desde hace tiempo y que está ya todo pintarrejeado pero que a ella le sigue gustando. Con menos de dos años le empecé a leer ese cuento y siempre (entonces no hablaba), cuando salÃa Maléfica ella hacÃa un sonido gutural tipo león. Y pasaba las páginas yo y ella querÃa volver hacia atrás para volver a ver a la mala. Cuando empezaron las noticias sobre que Angelina Jolie estaba rodando esta pelÃcula me froté las manos porque me apeteció enseguida ir. Si no hubiese tenido hijas hubiese ido sola. Pero teniendo a doña Tecla, ¿qué mejor excusa? A Mofletes prietos la dejé en casa porque me la conozco y sé que no hubiese aguantado. Yendo sola suponÃa que si no aguantaba la pelÃcula, Doña Tecla se hubiese tenido que sacrificar. Asà que se quedó en el jardÃn de casa tan contenta jugando con su bebé. Fue una tarde para las dos. Primero compramos palomitas y coca cola (sin cafeÃna que eran ya las seis de la tarde) La cara de Doña Tecla al entrar en esa inmensa sala fue de asombro. Pero a la vez se comportó como si ya hubiera estado muchas veces. Nos sentamos y le dije que si en algún momento tenÃa miedo que me lo dijera. Y empezó Maléfica. Ni pestañeó. Cambió dos veces de postura pero para darme el vaso de las palomitas y pedirme el de la cocacola. No me hizo ningún comentario, ni preguntas. Estaba acostumbrada a que los niños hablases en las sesiones infantiles de cine. Pero ella no. Permaneció callada todo el rato. Muy atenta. Es más, se nos terminó la coca cola que compartÃamos y le dije que si se quedaba sola un momento que iba a comprar otra. Y se quedó sin problema. Se lo dije a la mamá que estaba a mi lado que le echase un ojo por si acaso. Nada, ni enterarse. La verdad es que disfruté enormemente viendo la cara que ponÃa. La próxima vez, eso sÃ, iré en el dÃa del espectador porque entre las entradas y las palomitas la broma salió por 30 euros. HabÃa gente que me decÃa que no es para niños. ¿Lo es? Pues básicamente, no. No lo es. Doña Tecla tiene casi cuatro años (le quedan 3 meses) y dudo que haya entendido mucho de la pelÃcula. Pero es que a ella esa estética de los monstruos le gusta. Las hadas le encantan porque todo se lo explico a través de ellas y Maléfica, pues ya es un clásico en su vida. No obstante antes de ir le puse el trailer en el portátil y le gustó mucho. Es cierto que me arriesgué pero en esta vida el tema ensayo error es fundamental. Alguna vez me tocará salir del cine con ella. O no. ¿Quién sabe? La pelÃcula, desde luego, es buena. Tiene unos efectos especiales espectaculares, una estética medieval muy del gusto actual, recuerdo a Juego de Tronos. Las ciénagas, desde que Shrek las pusiera de moda, son indispensables en cualquier pelÃcula de culto que se precie. Disney sabe lo que hace y lo hace bien. Asà le va, claro (de bien, quiero decir) Os animo a verla. Angelina borda el papel y Vivian, una de sus hijas que interpreta a Aurora de pequeña, está comestible. PD. No me paga nadie por hablar bien de esta pelÃcula, ni me han regalado las entradas, ni las palomitas, ni nada que se le parezca. Simplemente cuento que me ha encantado porque asà es. Me ha rechiflado. No descarto ir a verla de nuevo, de hecho. Me puedes seguir en facebook, twitter y linkedin Sin categorÃa Tags DisneyMalçefica Comentarios Gema Lendoiro el 01 jul, 2014