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Blogs Madre no hay más que una por Gema Lendoiro

Cuando parir se convierte en un espectáculo

Gema Lendoiro el

Háganme ustedes un favor y díganme qué les sugiere esta imagen. Mientras se lo piensan yo les voy contando lo que a mí me sugiere:

  • Una foto irreal: ¿Por qué? porque sin bien cuando una acaba de parir la sonrisa es bastante parecida a la de esta señora, la foto parece (no lo sé) muy retocada para que se consiga el objetivo: demostrar la felicidad tras haber parido sola, sin ayuda.
  • Esto, en teoría. Sin embargo, si uno acude a la fuente de dónde es originaria esta foto se lee:

“Desafiar las maternidades ‘de película’ que el cine, la publicidad y la historia del arte enseñan reforzando el estereotipo surgido de las fantasías heterosexuales masculinas que responde a la dualidad madre/puta”

Esto lo afirma la mujer de la foto, Ana Álvarez-Errecalde

Ana es Argentina afincada en Barcelona. No sé de qué fuente ha bebido el machismo si allá o aquí en España. Conozco muchas sociedades machistas. Soy la primera en denunciar hechos machistas que vivimos y padecemos a diario las mujeres (hace poco lo conté aquí) pero juro por todos los dioses que jamás de los jamases he escuchado, ni siquiera por boca de un machista, que una mujer que pare a sus hijos, por el hecho de hacerlo, es, además,  una puta. Es más, famoso es el dicho machista de “todas las mujeres son unas putas menos mi madre, precisamente (imagino) por ese amor incondicional que casi todos los varones sienten hacia su madre,  por el hecho extraordinario de parirlos y cuidarlos (algo que genera un amor profundo en casi toda la especie humana).

Que nuestra sociedad tiene que dar muchos pasos de gigante para conseguir una plena igualdad, no lo discuto, pero que para ello se mezclen conceptos que nada tienen que ver entre sí, no sólo no hace bien a la causa, sino que además, la ridiculiza. El machismo quiere a la mujer en casa, ejerciendo de madre y de esposa. Luego no contempla una dualidad madre/puta. De ninguna de las maneras.

Pero esto no es todo. Sigue el texto diciendo:

“En mi experiencia para parir me abro, me transformo, no soy objeto y sangro, grito y sonrío”  

Son tantas las cosas que mezcla que me resulta complicado seguirlas. Dice que se abre. Todas las mujeres que paren vaginalmente lo hacen (al menos de forma física), si no me dirán por dónde sale la criatura. ¿Se refiere a que se abre por dentro, de forma mental? Pues como todas, que no le quepa la mínima duda. No conozco a ninguna mujer que haya parido y se haya limado las uñas al mismo tiempo.  Dice que no es objeto. Normal, es una  mujer, es un ser humano. Ningún objeto pare hijos (que se sepa). Dice que sangra, ¿no me digas? ¿y eso? Que grita, que ríe. Es decir, como todas. Nada nuevo bajo el sol.

Después de la segunda foto pone esto:

Estoy de pie con la placenta aún dentro mío, unida a mi bebé por el cordón umbilical, decido cuándo hacer la foto y mostrarme. Soy protagonista. Soy héroe. Al parir quito el “velo” cultural. Mi maternidad no es virginal ni ascéptica”

Parece que tiene la placenta “dentro suyo” que no “dentro de ella” Semánticas aparte, dice algo que parece que no tenemos claro el resto de las mujeres en el mundo: que no es virginal ni “ascéptica” ¿Piensa que el resto somo vírgenes o que creemos que lo somos? ¿está de cachondeo? Es que es como decir que su hijo ha salido del útero ¿ah sí? Sobre que es “ascéptica”” no me queda claro si ha confundido el palabro (inventado) con aséptica o con ascética. Si es con la primera, lógico, querida, estamos rodeados de virus, nadie es aséptica del todo, no lo consiguen los quirófanos, mucho menos un estudio de fotografía. Pero me temo que no van por ahí los tiros. Si por el contrario confunde la palabra con ascética, ¡ay querida, yo tampoco soy nada ascética por mucho que me haya releído varias veces Las Moradas. No pasa nada. Podemos parir igualmente.

No entiendo muy bien el tema de la virginidad, imagino (para luego confirmar) que sus tiros van hacia lo de siempre. La Iglesia Católica. Ahí es nada, la virginidad de María. ¡Toma ya! De verdad os hago una pregunta-confesión. ¿Alguna de vosotras ha tenido alguna vez problemas en ser rechazada por algún ser humano de la sociedad por estar preñada y no seguir siendo virgen? Es que no entiendo a qué vienen estas tonterías. Francamente, no las entiendo.

“Soy el arquetipo de la mujer-primal, la mujer-bestia que no tiene nada prohibido. Me alejo de Eva (y el castigo divino de “parirás con el dolor de tu cuerpo”) para ver a través de los ojos de Lucy (uno de los homínido encontrado hasta la fecha)”

El parirás con dolor de Eva (según el Antiguo Testamento) a algunas les ofende enormemente. Curiosamente a esta mujer le ofende pero no recurre a ninguna técnica para evitar el dolor. Si Dios (el del antiguo testamento) le dice que parirá con dolor, se rebela. Si un médico le habla de ponerle epidural para quitárselo, se rebela también, por violencia obstetricia. ¿Entonces en qué quedamos? No entiendo nada. Habla también que quitarse el velo, no sé si es un guiño al Islam (imagino que no será muy pro con esta religión puesto que el machismo es todavía peor en aquellos países donde se lleva a cabo la sharia y suelen ser muchos) Dice que es una bestia. Ah pues muy bien, yo no me considero bestia, entre otras cosas porque una de sus acepciones en profundamente negativa. Yo, que en muchos aspectos de mi vida soy más brusca que en otros, precisamente cuando he parido a mis dos hijas he sido todo lo contrario a una bestia. Un símil poco acertado en mi opinión.

Todo esto me parece muy confuso. Estoy segura de que esta mujer es un encanto, de que tiene unas ideas basadas en la bondad y busca (como casi todas las madres) lo mejor para su hija. Pero todas estas historias tan rocambolescas que, de un tiempo a esta parte, vienen hacendo un minúsculo grupo que sólo hace ruido en internet, de madres contrarias a todo lo que pase por estar supervisado por un médico, que desprecian los avances médicos, que van por la vida de naturales en todo pero después son partidarias de un aborto si la madre lo decide obviando que un aborto provocado es ir en contra de cualquiera de los principios de la naturaleza, que se comparan con una leona pariendo pero ninguna leona pide cita para abortar porque su cuerpo es suyo. Que miran por encima del hombro al resto de las mujeres porque acudimos a parir a centros médicos y por ello nos llaman “rebaño” y les falta poco para llamarnos ignorantes. Que en cualquier foro de internet te ponen links y links de páginas donde repiten sus mantras una y otra vez y que nos salvan de las garras de los malos porque nos advierten del negocio de las vacunas…todas estas madres, repito y enlazo la idea del principio del párrafo, nos hacen un flaquísimo favor mezclando conceptos tan dispares como machismo y decidir parir en casa o en el hospital, machismo y parir con ser creyente y/o ateo, católico o testigo de Jehová.

¿Quiere usted parir en casa? Adelante. ¿Le pasa algo a su hijo? Asuma las consecuencias igual que las asume un médico en un hospital si mete la pata. Haga usted lo que le salga de la tripa por no decir otra palabra que vendría ad hoc en este texto pero no me cuente usted historias para no dormir y me haga creer que por no parir en casa, solo, como usted y hacerme la foto toda ensangrentada y con la placenta tirada en el suelo soy menos madre, menos mujer, menos santa o menos puta (lo que usted prefiera según los casos) o menos lista que usted.

¿Exactamente qué reivindica esta mujer? Porque no la entiendo. ¿Feminismo, parir en casa, ser atea, ser natural, ser virgen, ser promiscua, ser puta? Me he perdido. Que me están empezando a recordar estas mujeres, las historias para no dormir que antaño contaban los curas como que si te masturbabas te quedas ciega. Amos hombre

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