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“El Canal de Todos los santos”. Una increíble expedición, fuente de bellos mapas.

“El Canal de Todos los santos”. Una increíble expedición,  fuente de  bellos mapas.
Descripción del estrecho de Magallanes.
Andrea Zucas el
Fernando de Magallanes, descubre el estrecho.El dibujo de la época representa cómo imaginaron sus contemporáneos ese hallazgo.

“Sabía que navegando en el océano, se observaban cosas admirables…determiné de cerciorarme por mis propios ojos de la verdad…tanto para entenderlos como para hacerles útil y crearme, a la vez,  un hombre que llegase a la posteridad”.

“Antonio de Lombardía”, cronista de la expedición.

La geografía de buena parte del mundo todavía estaba por explorar para unas potencias europeas que soñaban con liderar el comercio del producto más lucrativo: las especias.

América era solo un obstáculo entre España y las riquezas de Catay, Cipango, Indias y las Molucas. La ruta por tierra hacia los tesoros de oriente, resultaba extensa y difícil, al tiempo que conllevaba el pago de impuestos a una retahíla de intermediarios. Quien se aventurase a cruzar el océano dirección oeste, sería el amo del mundo, con nuevas tierras que reclamar.

La visionaria idea de un gran hombre, no fue atendida en su país. El proyecto se inició  al servicio, del Rey de España, Carlos I.

Fernando de Magallanes y su honorable gesta, comienzan su exploración, la premisa era sencilla: con destino a Las Molucas.

Más de catorce mil cuatrocientas setenta leguas, en casi tres años de aventuras, reales, las de entonces.

En 1515, se rumoreaba que  marineros portugueses habían descubierto el paso al Mar del Sur y se había estudiado un mapa, el de Martín Behaim.

Puerto de Sanlúcar de Barrameda, 20 de septiembre de 1519,

Una flota de 5 embarcaciones, mas de 250 hombres, capitaneadas por el portugués Fernando de Magallanes, zarpan a la mar con rumbo aún desconocido, un destino mágico que estaría salpicado de problemas, encuentros, rebeliones, hambre, enfermedades, luchas, placeres y también, descubrimientos. Una epopeya allí los espera, en “el fin del mundo.”

Nada escapa a la pluma del cronista, enrolado como voluntario y destinado a la nao Trinidad, junto al capitán y otros 53 marinos. Afortunadamente, observa y describe minuciosamente, las visiones en los espejos del mar, el firmamento, luego las tierras, su fauna, su flora, los nativos, su vocabulario, vestimentas y costumbres. Algunas veces… se deja llevar por el entusiasmo y describe como vistas por él, fantasías escuchadas y exagera sobre el tamaño de los indígenas Patagones, con quienes toman contacto y así les llaman, en relación a un personaje de ficción de la época. Todo escrito día a día sin interrupciones, y su suerte, gozaba de una buena salud. Relación de Antonio Pigafetta, primer viaje entorno al globo, 1524.

Primer mapa del extremo sur de Patagonia, Antonio Pigafetta.

 

Elabora, 24 mapas, entre ellos el primer mapa del extremo sur de Argentina, Patagonia: un sitio con memoria e inhóspitas bellezas.

Surcando las dificultades oceánicas, entre vientos alisios y corrientes incontrolables, desplazándose sobre enormes olas, con sus cinco naos y el crujir de maderas azotadas, junto a un sinfín de maniobras de velas al viento… visiones y monstruos marinos, rezando piedad y encomendados a Dios…avanzan en su desafío.

Islas Canarias, Cabo Verde, Bahía Santa Lucía, Río de La Plata, navegando al sur por toda la costa sudamericana, se aproximan al destino, naves de la expedición desviadas por un temporal avistan las islas Malvinas. El 21 de octubre, desembarcan en el sitio que denomina “Cabo de las Once mil Vírgenes” y el día 31 a la Bahía San Julián, dónde fondean y se resguardan del invierno. Lo inhóspito de aquellas costas junto a la llegada del invierno, y sometidos a un intenso racionamiento de víveres, la tripulación se iba infectando por una temible mezcla de miedo y rabia denominada motín.

“Este portugués  acabará con todos nosotros”, quería reforzar la exclamación, pero no se atrevía por temor a perder mas dientes. Su cuerpo iba al unísono con el barco: el escorbuto parecía desintegrar sus huesos del mismo modo que el mar y las tormentas carcomían el casco de la embarcación.

Gaspar de Quesada, y Juan de Cartagena fomentan el descontento en tres de las naves y (viene a cuento mencionar, que Juan Sebastián Elcano era uno de los amotinados), una conspiración contra Magallanes que el mismo, logra sofocar, aunque la nao San Antonio y muchos de sus tripulantes regresan a España, “Sabía que era preciso pasar por aquel estrecho”. Lo había visto en viejos mapas y leyendas.

Continúan, adentrándose en la bahía descubriendo un anhelado canal, que denomina en honor a ese día, “El canal de todos los santos”, siendo posteriormente llamado “El estrecho de Magallanes”.

Costeando, reconociendo, denominando y cartografiando todas sus costas.

“Cruzar el canal no ha sido fácil dado a lo complicado de las costas. Las aguas no eran calmas y las tempestades nos dejaban sin fuerzas, aquellos vientos atormentaban las mentes y las almas”. Hemos visto humos misteriosos y a esas tierras las denominamos “Tierra del Fuego”.

Carta del estrecho, próxima población fundada por Sarmiento de Gamboa, en 1584.Puede advertirse el “Rey don Felipe”.

   28 de Noviembre de 1520,  “después de 22 días conseguimos desembocar del laberinto,  la nao Santiago, se hizo añicos contra las rocas, la San Antonio, sublevada había regresado, navegábamos con tres naos y menos hombres, pero llevábamos de esclavos, a un nativo de Brasil y ahora: a un Patagón…”

“El Mar del Sur, nos sorprendió tan serenamente al desembocar, que le llamamos, Pacífico. Ese enorme e interminable mar, en el cual navegamos durante tres meses y veinte días, sin probar ni un alimento fresco, comiendo serrín, bebiendo agua podrida, nos vimos obligados a comer el cuero de vaca que cubría los palos y por cada rata se pagaba medio ducado. Teníamos las encías hinchadas, una temible enfermedad  y muchos incluso los nativos esclavos, murieron.”Se encomiendan a La Virgen de la Victoria y a la Virgen de Santa María la Antigua.

Pintura de Gordon Grant, El Unity de Schouten.

Arriban a Filipinas, donde acontece la batalla de Mactán, Magallanes pierde su vida en una absurda lucha con indígenas, aún así, moribundo cubre a sus hombres para que estén a salvo.

El objetivo principal del viaje es logrado. Las circunstancias llevan a Elcano a tomar el mando. Con solo una embarcación, llegan a las Molucas, navegando hacia el oeste e intentando evitar contacto con portugueses, la nao Victoria, iba cargada de especias.

Casi sin recursos y sin hombres, (algunos habían decidido quedarse en las maravillosas islas, inducidos por las bellezas del lugar), doblan el cabo de la Buena Esperanza, arriban a las islas de Cabo Verde.

Puerto de Sanlúcar de Barrameda, 6 de septiembre de 1522, la Nao Victoria, capitaneada por Elcano, y su tripulación de solo 18 cansados y hambrientos hombres, arriban a la Bahía de Cádiz.

Y con ellos, la gloria eterna, Juan Sebastián Elcano, Fernando de Magallanes y su gesta, en su titánica misión.

“Primus circumdedisti me.”

Hace 494 años, la primera circunnavegación de la historia, y con ella, un estrecho descubierto, fuente de sucesivas e intensas exploraciones. Futuros sucesos, que acontecerían entre españoles, ingleses, holandeses, franceses…y con ellos, también  memorias, representadas en un sinfín de cartografías soñadas, que serán frutos de otras historias. 

Jansson,Magellanica, 1640.
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Andrea Zucas el

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