Se juega como se entrena, dicen los entrenadores de fútbol con toda la razón. Marc Márquez también corre como se entrena. El miércoles se fracturó el peroné al ejercitarse al máximo nivel en una sesión de “dirt track”, una especialidad que es la mejor manera de dominar una moto en las curvas. Es una práctica que Casey Stoner ejecutaba con maestría, pues es muy popular en Australia. Y le sirvió de mucho en su crecimiento como gran piloto. En el “dirt track” se saca el pie fuera de la moto para evitar la caída e incluso coger algún impulso. Es la causa por la que Rossi saca su bota en las curvas. Equilibra pesos. Ahora, Márquez, que también se ha convertido en un especialista en los entrenamientos de esta rama del motociclismo, se ha roto el peroné al emplearse a fondo, como siempre hace. La incógnita es si estará preparado para competir en el Gran Premio de Qatar, que se disputará el 23 de marzo y que es la habitual apertura del Mundial.
El campeón del mundo de MotoGP 2013 asegura que defenderá su título desde esa primera cita. No piensa faltar. No peleará al cien por cien de sus posibilidades, pero cubrirá su merma física con su valentía. Los médicos afirman que su recuperación necesitará entre tres o cuatro semanas, el tiempo justo para acudir al primer duelo con Lorenzo, Rossi y Pedrosa.
Marc llevará a cabo una esmerada recuperación durante cuatro semanas para llegar al circuito de Losail en buenas condiciones y dar la cara en la lucha por renovar el entorchado. El año pasado se coronó campeón del mundo como gran “rookie” del año. Ahora, todos los rivales le tienen ganas. Saben que se enfrentan al nuevo artista de este deporte, tocado con dotes de genio. Un peroné no será el enemigo.
Otros temas Tomás González-Martínel