Pablo M. Díez el 04 nov, 2010 La máquina eléctrica es el único adelanto que se permite este barbero callejero de Pekín No es una nueva versión “made in China” de la emblemática película del “cine quinqui” español de la Transición. Aquí no se verá un remake de ojos rasgados de las aventuras de “El Torete” y demás golfos escapando de la Policía a bordo de sus Seat 124 por la periferia de una Barcelona post-industrial y hundida por el “caballo”. Estos “pelos callejeros” son de verdad, los que cortan los barberos que siguen resistiendo al paso del tiempo y ocupando muchas calles y plazas de China con sus tijeras, sus peines y sus lociones capilares. Ya sea en los viejos y estrechos callejones (“hutong”) del centro histórico de Pekín o en los aledaños de la estación de Wuwei, en la atrasada provincia interior de Gansu. Por unos pocos yuanes, y a la vista de todos, estos barberos cortan el pelo, afeitan a navaja y hasta masajean el cuero cabelludo con algún ungüento en sus rudimentarios tenderetes. Son los auténticos “pelos callejeros” de China. Li Yun afeita y corta el pelo en los aledaños de la estación de Wuwei, en Gansu Otros temas Tags 124barberoscaballocallejeroschinacinedrogasespañolheroinapeinespekinpelospeluquerosperrosseattenderetestijerastradiciontransicion Comentarios Pablo M. Díez el 04 nov, 2010
Entrevista íntegra a la Nobel de la Paz María Ressa: “Las elecciones de Filipinas son un ejemplo de la desinformación en las redes sociales”