CaixaBank y el Banco de Sabadell meditan cambiar su sede desde la ciudad Condal a otros lares, sea Madrid, Alicante, Zaragoza o un pueblo de Asturias, como se ha filtrado como última novedad. Las dos entidades bancarias dicen ser capaces de cambiar su sitio social en dos horas. Muchas otras empresas, algunas famosas, ya han cambiado su sede o están en camino de hacerlo. Los independentistas piden el boicot a los dos bancos. Declararán la independencia el lunes. ¿Y el Barcelona que hará, también se irá a Madrid, o se quedará “en otro país”, fuera de España y de la Liga española?
En esta hipocresía que han forjado los independentistas, si el lunes declaran la independencia y el Barcelona la apoya, esperamos que deje inmediatamente de disputar la Liga de ese “Estado español franquista, reaccionario y fascista” en el que tan gustosamente han conquistado la mayoría de las Ligas españolas desde 2004. Noi, cuando el Barcelona ganaba las Ligas no decían que España era un Estado fascista, solo lo dicen cuando las pierden, qué casualidad.
No hay mayor desvergüenza que la de Pep Guardiola, que afirma, para defender la independencia como sea, que España es un Estado represor. En ese Estado represor ha hecho la gran carrera profesional de su vida que le ha llevado a la Bundesliga y a la Premier. Entonces no se quejaba de nada, solo de hablar del puto amo de la sala de prensa, que era Mourinho. Y hablabla con total libertad todas horas, hecho que demuestra lo mal que España ejerce su dictadura.
El lunes que viene, Puigdemont, que debería ir a Llongeras para cuidarse el matojo, declara la independencia. El Barcelona jugó el pasado sábado a puerta cerrada. Intentó no jugar, en apoyo al sector independentista. Dos directivos dimitieron por esta deriva suicida e incongruente que exigirá medidas drásticas en poco tiempo. Muchos aficionados azulgranas están en contra de esa decisión de jugar sin público, para apoyar esta deriva sin timón. Otros criticaron a Bartomeu, en sentido contrario, por quedarse de nuevo a medio camino de la nada. Cierro el campo pero juego, que pierdo seis puntos y el Madrid está a siete. El quid de la cuestión es: si juegas a la independencia, Bartomeu, sé consecuente y el lunes, cuando se declare esa independencia, debes decir que el Barcelona se retira de la Liga. ¿O tendrás la desfachatez y cara dura de seguir jugando en una Liga de un estado diferente al que odias y del que quieres separarte?
El Barcelona, como el gobierno catalán, han entrado en un sendero suicida que les lleva a la incoherencia total. Si el Barcelona pide la independencia, debe dejar la Liga española ya. Pero entonces, el club pasará de golpe a ser un equipo de tercera, pobre, porque no tendrá ingresos y los contratos suculentos de hoy desaparecerán de golpe, rescindidos al instante, ya, por mucho que Roures, el independentista que vende la Liga española, intentara salvarlos.
El problema es que el Barcelona, sin la Liga española, sin el Real Madrid que alimenta su primitivismo de odio nacionalista, no es nada. ¿Qué sería del Barcelona sin el Real Madrid? Moriría inmediatamente. El Barcelona es rico gracias a la Liga española, a España. El lunes deberá ser consecuente. Pero Bartomeu querrá continuar en la Liga, que le aporta el nivel, el dinero y el camino de ganar más dinero en la Champions y de mantener una relevancia internacional del club que se ha ganado en nuestra Liga nacional. El Barcelona, sin la Liga, sin la Champions, es cero.
Ya hay jugadores azulgranas que se sienten españoles y que dicen estar molestos con esta situación. Se juegan sus contratos. Piensan que todo es una apuesta bravucona del Barcelona, que no llegará ser real, pero ahora están preocupados. Se ha ido todo de las manos y el Barça está sin dirección. El club catalán pide la independencia y querrá seguir en la Liga, en esta incoherencia absoluta. Porque hay un punto de partida fundamental que acabaría con Bartomeu y con su Junta, un minuto antes de acabar con la relevancia del Barcelona como entidad: si el Barça no juega la Liga, Messi no seguirá en el Barcelona. Su contrato quedará rescindido al momento por romperse la clave del mismo, la disputa de la Liga española y de la Champions. Con Messi, y con Iniesta, tonterías las justas.
Otros temas
