El destacamento de 550 «marines» estadounidenses que se encuentra ya en la base aérea de Morón de la Frontera (Sevilla) para responder a cualquier crisis que acontezca en el norte de África cuenta con seis aeronaves MV-22 «Osprey» para poder transportar de modo inmediato a la fuerza de reacción rápida de EE.UU.
Además, el destacamento dispondrá de dos aviones KC 130J «Super Hercules» para su abastecimiento en vuelo o evacuación médica y poder tener así total independencia en las misiones.
«El contingente de Marines se desplegará como una unidad totalmente autónoma con capacidad de fuego, comunicaciones y transporte. Además cuenta con un hospital de campaña para su despliegue en las situaciones de crisis que puedan acontecer en África», informan fuentes estadounidenses.
Estas son las ocho aeronaves militares desplegadas por el nuevo contingente estadounidense en una base aérea de Morón de la Frontera que, en virtud del acuerdo alcanzado «por el plazo de un año» entre España y EE.UU. (Consejo de Ministros del 19 de abril), se convertirá en plataforma de «defensa» y «contraataque» para evitar otra crisis como la acaecida en el consulado en Bengasi (Libia) en cuyo asalto murieron el pasado 11 de septiembre el embajador en Libia, Christopher Stevens, y otros tres ciudadanos estadounidenses.
El «Osprey» («águila pescadora» en inglés) es un aeronave de rotores basculantes (convertiplano) que ofrece las facilidades de maniobra de un helicóptero y la velocidad de un avión de transporte militar, teniendo una capacidad de desplazar a 24 «marines». Además tiene un despegue y aterrizaje vertical, lo que permite su acceso a la zona de operaciones. De este modo, ante una eventual crisis en un país africano los seis «Osprey» podrían desplegar a 144 marines. Por ejemplo, en 3-4 horas se habrían situado en Bengasi tras recibir el aviso de emergencia.
Esta aeronave fue introducida en servicio por el Cuerpo de Marines de los Estados Unidos en 2007 en Irak. La página oficial de los Marines presenta sus cualidades con una frase palmaria de un mando de los Marines en Irak: «Redujo nuestro campo de batalla del tamaño de Texas al tamaño de Rhode Island» (2º y último Estado en extensión de EE.UU., respectivamente). O lo que es lo mismo, del tamaño de aproximado de Francia a la mitad de la Comunidad de Madrid. (¿Exageración?).
Desarrollada por las compañías estadounidenses Bell (helicópteros) y Boeing (aviones y también helicópteros como «Chinook» o «Apache»), el MV-22 «Osprey» tiene una velocidad máxima operativa de 460 km/h al nivel del mar, ascendiendo esta velocidad a los 565 km/h a una altura de 4.600 metros. «Es dos veces más rápido que un helicóptero», asegura el fabricante.
Cuenta con capacidad de fuego de dos ametralladoras: 1) una M240 de 7,62 mm. o una M2 Browning con 12,70 mm., según elección y 2) una GAU-17 Minigun, montada en la parte inferior de la aeronave y con manejo y control con vídeo desde el interior.
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