¿Sabes que algunas aguas del grifo (las duras) están “envenenadas” y que nuestro pelo se la bebe? Tienen minerales sólidos como calcio, magnesio, plomo y hierro disueltos como pequeñas «rocas», que se atan a las proteínas del cabello cuando nos lo lavamos. Y no, no matan al pelo. Pero impiden que se vea tan bonito como podría. Y no es el único “veneno” que se traga nuestra fibra capilar. Las partículas del aire contaminado, algunos medicamentos (los restos de antibióticos o paracetamol tardan 6 meses en eliminarse según me cuentan), las siliconas y otros ingredientes de los productos capilares también se adhieren al cabello cual garrapatas. Todo esto apaga el pelo, e impide que se mantenga limpio durante varios días, que tenga volumen, que el color quede uniforme o que los alisados o permanentes duren el tiempo prometido.
Y un lavado normal, por mucho que refreguemos, no puede con tanto “trabajo” de limpieza, entre otras cosas, porque el primer “enemigo” es el agua con la que lo hacemos. Pero el frotar se va acabar! Ha llegado a España de EEUU el “Fairy” capilar, se llama Malibú C (una línea limpiadora a base de vitamina C Pura), y en Madrid lo tienen en R,Difusión (para el resto de España miradlo en su web), y os aseguro que nunca he visto hablar con tan entusiasmado a Iván Barreda (el propietario de estos salones) como de los increíbles resultados de este tratamiento.
El proceso no es muy largo: te lavan con un champú de esta línea (y agua destilada, por supuesto), te aplican el producto “Fairy”, y te colocan un secador durante 20 minutos, para que el calor potencie el efecto, te vuelven a lavar, y acondicionan con unos cocteles de proteínas, hidratación o brillo, que hacen las veces de mascarilla, pero sin tiempo de exposición. Estos últimos se aplican siempre porque el pelo queda tan puro que le falta cosmeticidad. Y yo, que lo he probado, doy fe porque después de este tipo de lavado, el pelo “cruje” un poco, se nota un poco áspero, pero después de las proteínas se suaviza por completo. “Si vamos a hacer color o una permanente, se realizan inmediatamente después del “fregado”, que no hay “barreras” y el color sube mejor, más uniforme y más rápido, y el coctel nutritivo se aplica como toque final”.
Aquí tenéis mi melena antes y después (además de que está bien peinada, lo que yo noté es que está más “esponjosa”)
¿Encarece mucho los tratamientos? Cuesta 25 euros, que no es mucho más que lo que nos cuesta un champú y una mascarilla.
¿Más? Hay una versión específica para limpiar el pelo de pigmentos o henna que se utiliza, por ejemplo, para rebajar el color cuando se pasan de oscuro, o si te haces un color de fantasía y no te gusta el resultado.
Además del “Fairy”, que es el producto estrella, la firma tiene productos como “CrystalGel”, un remedio para cortar la oxidación post-decoloración (la decoloración con el peróxido, sigue trabajando hasta 72 horas después de su aplicación), y evitar sobre todo, en cabellos muy sensibilizados, la rotura de los mismos. Después de aclarar (mechas, balayage, babylights…) se aplica con agua mineral, y después se aplica el champú y el coctel acondicionador.
¿Os animais a probarlo?
Pelo