¿Exfoliarnos el cuero cabelludo? ¡Claro! Igual que nos exfoliamos la piel del cuerpo o el rostro para eliminar las células muertas que impiden el paso de activos, el cuero cabelludo necesita estar libre de ellas tambien para que la raíz del pelo reciba todo el alimento que le damos con los productos capilares.
Porque, como le sucede a la piel del resto del cuerpo, el cuero cabelludo se ve afectado por la suciedad, grasa, sudor y contaminantes, que pueden obstruirlo, reduciendo la capacidad de crecimiento de un pelo saludable. De que esté sano dependerá que tengamos el pelo vivo y radiante.
¿El problema hasta ahora? Que como no nos lo vemos, tendemos a olvidarlo. Como lo tenía olvidado la cosmética capilar. Solo la firma René Furterer le ha dado siempre mucha importancia al bienestar del cuero cabelludo. Y ahora Kérastase, que ha lanzado un exfoliante lavante que me tiene enamorada.
Fusio Scrub actúa de forma similar a un producto de limpieza facial profunda, eliminando toxinas y liberando la piel y el pelo de impurezas, dejando una superficie impoluta e incluso más fresca (se nota en la cabeza un ligero efecto de frescor como el de un caramelo Ricola suave en la garganta). Y cuando se aplica no solo no hace falta usar champú, y con un solo lavado basta, no hacen falta los dos lavados clásicos, de lo potente que es su efecto limpiador. Según el dosier de prensa, elimina hasta 3 veces mas partículas de contaminación que el champú clásico, y hace que el pelo brille hasta 6 veces más y que tenga hasta un 79% más de volumen.
Han lanzado dos fórmulas, un Scrub Energisant con minerales de sal marina, para cueros cabelludos graso; y Scrub Apaisant, con semillas de jojoba y cáscara de naranja, para cueros cabelludos normales y sensibles. Y dos tamaños, uno de uso profesional, y otro para casa.
¿La frecuencia de uso? Igual que no nos hacemos todos los días una exfoliación facial o corporal, tampoco hace falta hacérsela en el pelo. Se trata de un tratamiento de cuidado intenso, y con realizársela cada 3 semanas, por ejemplo, valdría (aunque aquí lo ideal es que os lo diga vuestro peluquero).
¿Más? Para que la experiencia de la exfoliación sea un momento sensorial apetecible, el ritual en el salón incluye un masaje estimulante con aceites esenciales (el profesional nos dará a elegir entre tres mezclas especificas que ha lanzado también la firma) que “ca vaux la visite” (vale la visita), como dicen los franceses.
Y sigo con las buenas noticias, y otra novedad de la firma: K Water, un agua casi milagrosa que deja en el pelo una película de brillo “espejo” sorprendente.
Se trata de una solución líquida (aunque parece agua, es anhidra) que recubre cada pelo y lo deja uniforme, suave y, sobre todo, muy brillante, y con un sensación de ligereza total.
¿Su fórmula? Una mezcla de aminoácidos y proteínas 10 veces más pequeñas que las que se encuentran en cremas o mascarillas, y que están en libre movimiento.
¿Su forma de actuar? Esas moléculas se activan instantáneamente con el contacto con las microgotas de agua del cabello y se organizan en una película laminar ultrafina para recubrir el microrrelieve de la fibra capilar y crear una superficie perfectamente homogénea y ligera, en tan solo 8 segundos. Y me aseguran que son tan “inteligentes” que se adaptan a las necesidades del cabello automáticamente. Es decir, que sus estructuras suavizantes se adhieren más a las zonas más debilitadas y aumentan su efecto si el cabello está más dañado. A todo esto que hacen le han llamado tecnología lamelar (han tardado 3 años en conseguirla) y estoy segura de que la veremos en muchos más cosméticos.
En definitiva, es al pelo lo que una ampolla flash al rostro.
¿Cuándo usarla? En esos momentos en los que está falto de nutrición, parece apagado, áspero o simplemente no está en su mejor momento. También es perfecto para ocasiones especiales, y se puede combinar sin problema con mascarillas o cualquier otro tratamiento de cuidado que uséis habitualmente.
K-Water lo que hará es “sellar” lo que le hayáis aplicado antes, y dejará ese brillo espejo del que os he hablado.
Os gustará especialmente a las chicas más jóvenes que no necesitáis nada mas que un poco de brillo, y a las no tan jóvenes con el pelo muy fino y que no “aguantáis” los acondicionadores, porque este producto ni “pesa”, ni apelmaza.
¿La mala noticia? De momento (acaban de lanzarlo en septiembre) solo nos lo pueden poner en la peluquería porque requiere una mano experta para aplicarlo bien y que cubra todo el pelo, pero en 2020 lo sacarán para uso casero, con una formula que será más fácil de extender, supongo. También lo prefieren así porque el resultado perfecto de brillo se consigue con el “brushing” con secador.
Y aquí os dejo el resultado de la combinación de estos procutos en mi pelo!
