Los psicólogos apuntan que en estos días de confinamiento es importante que el espejo nos devuelva la mejor imagen de nosotros mismos porque influye de manera notable en la gestión de las emociones. No podemos abandonarnos físicamente porque repercutirá negativamente a nuestro estado de ánimo. Os dejo un resumen de los consejos de los profesionales (algunos de ellos ya los he publicado previamente, pero he decidido reunirlos todos en un mismo post) para que vernos bien, nos haga sentir mejor.
1.Teñirse en casa sí, pero…
¿Le toca el tinte quincenal? El peluquero Eduardo Sánchez recomienda que nos ciñamos a retocarnos la raíz, porque si el resultado no es el deseado, será más fácil arreglarlo después en la peluquería. “Es muy importante hacerse la prueba de alergia en un mechón de la nuca porque no sólo descartará una posible reacción, también comprobará como queda el color”. Nos aconseja no lavarnos el pelo previamente “porque el cabello limpio hace que el tinte “agarre” menos y es más sensible a irritaciones”. Que nos aplíquemos vaselina o similar en el contorno del rostro, cuello y nuca para evitar manchas. Y elegir siempre un tono más claro que el nuestro “porque, una vez aplicado, suele ser más oscuro de lo que parecía en la carta de color”. ¿Más? Ser rigurosos con los tiempos de exposición que marca el fabricante porque pasado ese tiempo deja de hacer efecto y lo único que se conseguiremos será irritar el cuero cabelludo; aclarar con agua tibia o fría para que el color se asiente, y que no nos asustemos si en el primer momento el color no es el que esperabamos. “El definitivo se aprecia transcurridos un par de días, cuando los pigmentos se van matizando”.
2. Con las tijeras no se juega
La peluquera Noelia Jiménez recomienda que no nos cortemos el pelo nosotros mismos si no es imprescindible, especialmente si tenemos el pelo lacio y fino, porque es más difícil disimular los errores. Y aprovecha para advertir a las habituales de salones de peluquería que a la hora de desenredarse el pelo no lo hagan en seco porque el cepillo no se desliza bien y se rompe la cutícula. “Siempre hay que realizarlo con el pelo húmedo y con un cepillo de esqueleto o peine de púas anchas”. Y sin una fecha exacta de “libertad” a la vista, como no podemos esperar a someternos a un tratamiento de hidratación en los salones, toca regalar a nuestra melena, un día a la semana, un extra de suavidad en forma de mascarilla de aceite de oliva o de Argán, manteca de karité o cacao.
3. La manicura semipermanente no se retira a mordiscos
Lucero Borja de “My Little Momo” nos cuenta el proceso para no dejarnos las uñas en el intento: Se lima la capa superior, la del brillo, sin llegar a retirar color porque ahí ya se puede debilitar la uña. Se empapa un algodón con acetona pura (valdría un quita esmalte de acetona pero habría que dejarlo mas tiempo) y se coloca sobre el esmalte. Se envuelve la yema del dedo con papel de aluminio y se deja actuar 15-30 minutos. Con un palito de naranjo – en su defecto una cucharita de café- se remueve la laca suavemente, y se aplica por toda la uña un aceite endurecedor (o cualquiera que se tenga en casa).
4. ¿Y si el baño se convierte en nuestro masajista?
Este sedentarismo obligado puede hacer que se ralentice nuestra circulación sanguínea (y aparezca la temida celulitis). Paz Torralba, directora de “The Beauty Concept” recomienda aprovechar la hora del baño o la ducha para activarla. “Frotad la piel enérgicamente a diario con un guante de crin, y mejor aun con el guante de dos caras de Biologique Recherche (con la parte gruesa se activa la circulación y con la fina se potencia la penetración de los cosméticos que apliquemos a continuación)”. Un día por semana, exfoliar el cuerpo para eliminar las células muertas. Y que aprovechemos que tenemos tiempo para darnos baños de sal (vale la sal gorda de cocina) con agua caliente durante 15 minutos que ayuda a eliminar toxinas (la sal las atrapa) y drenar líquidos
5. No perdamos las formas
Ni las referentes a nuestros modales, ni las de nuestro cuerpo. “Frutas, verduras, frutos secos y tratar de realizar 30 minutos de ejercicios básicos son las medidas más efectivas para lograrlo”, apunta la experta en nutrición, Biri Murias. Son días para aprender a seguir una dieta saludable y practicar ejercicio a diario en casa, con aplicaciones o, incluso, buscando vídeos de expertos en YouTube para poder hacer en familia. “Nutrientes como cobre, zinc, hierro, selenio, vitamina A, vitamina B6, ácido fólico (vita- mina B9), vitamina B12, vitamina C y vitamina D ayudan mucho a sanear el sistema inmune y, sobre todo, podemos ingerirlos dentro de una dieta adecuada sin tener que recurrir a complejos vitamínicos, ya que estos deben tomarse en cantidades adecuadas y con una frecuencia determinada”. Esta especialista nos aconseja eliminar grasas saturadas, alimentos ricos en azúcares y otros refinados “que pueden producir patologías como dislipemias, diabetes tipo 2, alteraciones ateromatosas vasculares e incluso favorecer la apa- rición de procesos tumorales que tendrán un impacto negativo en el sistema inmunológico”.
6. Ojo con el contagio al usar la cosmética.
“Prohibido compartir cremas, brochas, bálsamos labiales, productos de maquillaje, peines o cepillos con el resto de la familia. Esto es aconsejable siempre pero especialmente en situaciones como la actual”, advierte Carmen Navarro. Esta esteticiene recomienda desinfectarse las manos antes del desmaquillado, limpiar con un pañuelo desechable el envase que vayamos a utilizar o rociarlo con una bruma alcohólica para liberarlo de cualquier germen, utilizar preferiblemente desmaquillantes que se retiren con discos de algodón, y si se emplean los jabonosos que requieren secarse el rostro, que se utilicen toallas de algodón limpias cada día. ¿Lo peor? Las esponjas reutilizables que pueden ser un lugar de cultivo para virus y bacterias. En cuanto a los cosméticos son preferibles los de envases airless, que los aíslan de partículas contaminantes.
7. Que nuestra silla sea nuestro gimnasio
Ahora que vamos a pasar varias semanas sin pisar el gimnasio, Miguel Romera, el entrenador personal de David Lloyd Aravaca, asegura que la clave para que nuestros músculos y nuestra figura no se resientan es continuar nuestro entrenamiento en casa mediante rutinas “full body”, es decir mediante ejercicios que impliquen un control global de la postura y la movilización/estabilización de diferentes articulaciones a la vez. ¿Por ejemplo? Sentadillas o flexiones de codos y planchas. A su vez usaremos una metodología de entrenamiento que impliquen un mayor gasto energético como son los entrenamientos de alta intensidad o más bien conocidos como HIIT ( High Interval Intensity Training ). Y para hacer una rutina variada que implique todos los grupos musculares sin las maquinas del gym aconseja que nos sirvamos de nuestro propio peso corporal o un mínimo de material como puede ser una silla para realizar una rutina de entrenamiento variada que implique el global de tu cuerpo y te exija el máximo.
8. ¿Bajón emocional? Perfúmate y perfuma tu casa
La Academia del Perfume pone el foco en la dimensión sensorial y emocional del perfume como un aliado clave en estas fechas ya que puede ayudarnos a sobrellevar la soledad, evocando momentos felices y personas que, por las circunstancias, no pueden estar a nuestro lado. Así, nos invitan a perfumarnos con aromas que nos evoquen los momentos felices que hemos vivido con cada uno de ello. También desde Carrière Frères, la casa botánica que captura fragmentos de naturaleza para transportarlos a nuestro hogar aseguran que percibir en el ambiente olores agradables influye positivamente (y mucho) en el estado de ánimo de las personas.
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