De mi adoración por las pre-bases o primers, ya nadie duda. Son, en mi opinión, el gran invento cosmético para las amantes del maquillaje.
Como su nombre indica, se utilizan normalmente antes de la base de maquillaje, y su misión es la de alisar la superficie de la piel para que el fond de teint no se “cuele” en las arrugas y poros abiertos, y de paso, prolongar la duración del mismo. Algunas van más allá, y añaden pigmentos iluminadores o tonos correctores, que minimizan el aspecto de las imperfecciones. Y las más sofisticadas, suman ingredientes tratantes. Pero todas tienen un denominador común: dejan la piel como el terciopelo.
He tenido muchas favoritas: mi primer “flechazo”, fue con Rose Illusión de La Prairie, pero después he sucumbido a Instablur The Body Shop, Visible Diference de Elizabeth Arden, Stay Flawless 15-Hour Primer de Benefit, Pre-Base de Mary Kay, Facefinity All Day Primer SPF 20 de Max Factor, Illuminating Perfecting Primer de Estée Lauder… La lista de mis debilidades es larga.
Y esta misma semana, se ha sumado una más.
He descubierto un Top Secret, que he estado tentada de guardarme para mi solita. Pero como soy transparente – esto de tener un blog es un striptease permanente-, voy a desvelar mi nueva artimaña para tener una piel de satén: Top Secrets Instant Moisture Glow de Yves Saint Laurent (54€ en El Corte Inglés).
Mi secreto a voces – aunque este sea un susurro, que a ninguna mujer le gusta confesar que tira de armas para estar más favorecida- es un primer “enriquecido”
1. Está formulado con un polvo que se utilizó por primera vez en la Ciencia Espacial como material aislante en el rover explorador de Marte en 1997. ¿Sus bondades? Mas del triple de poder de absorción de grasa (hasta 4.000 veces su propio peso) que los principales absorbentes, por lo que dispersa y evapora el sudor más que ningún otro producto; y se conoce como el material mas ligero del planeta, y esto hace que se funda por completo con el cutis, sin añadir una “capa” más en la piel (de ahí que se pueda mantener en secreto…).
2. Incorpora perlas beige rosadas ultraouras, con reflejos nacarados plata y diamante, que interactúan con la luz circundante para dispersar los rayos. De este modo difuminan visualmente los poros y las imperfecciones. La piel adopta, literalmente, la suavidad del satén (han usado un sistema de medición de las vibraciones de ese tejido y de la tez tras usar el producto, y tienen las mismas!!!).
3. Incluye micro gotas de agua que sacian la sed de la piel al instante y a largo plazo (su efecto dura hasta 72 horas, el máximo conseguido con uno de estos productos). De ahí que pueda ser un sustituto de la loción hidratante.
¿Cómo usarlo?
De 3 formas: solo, “para conseguir un look fresco en los días de relax”, como dice Lloyd Simmonds, director creativo de YSL Beauty); antes del maquillaje, para disimular defectos y alargar la duración del fond de teint; y después, como retoque, para eliminar brillo,s o sellar el maquillaje en los puntos “débiles” como frente, nariz y barbilla.
¿Más virtudes? Se acompaña de una herramienta “cómplice”, con doble aplicador giratorio:
–Satin Brow (36€ en El Corte Inglés) tiene por un extremo, una brocha que sirve para aplicar la pre-base sobre el rostro.
Aunque os sorprenda -a mi también la primera vez que lo vi hacer-, es un arma que utilizan algunos de los grandes maquilladores porque, según me contó en una ocasión Eduardo Jiménez (maquillador oficial de Yves Saint Laurent en España), para ellos, la cara es un lienzo y con el pincel escogen a donde quieren llegar y la cantidad de producto que quieren aplicar en cada zona. En este caso, la recomendación es aplicarlo desde el centro del rostro hacia el exterior efectuando movimientos circulares.
-Y en el otro extremo, una esponja biselada, que se utiliza para darse retoques a lo largo del día.
Se aplica el producto con suaves golpecitos de “sellado” sobre la frente, el mentón o en la parte superior de los pómulos, y de ese modo se refresca el maquillaje con un plus de hidratación.
Espero que, como yo, no sepáis guardar un secreto, porque éste es para gritarlo, y con amplificador, que se acerca la nochevieja…
¡Feliz (y resplandeciente) entrada al 2016!
Maquillaje