La herramienta por excelencia para el rejuvenecimiento de la piel y la depilación se cuela en otros campos. Os hago un repaso de las “otras” aplicaciones de esta luz, que puede con (casi) todo.
1.- CÓDIGO DE BARRAS.
Según el doctor César Arroyo de la Clínica IO y la doctora Adriana Ribé de Ribé Clinic, el láser ablativo fraccionado consigue unos resultados excelentes y seguros a la hora de borrar las antiestéticas arrugas de la zona del “bigote”. Pero la enorme inflamación y las pigmentaciones que provoca (aunque sean transitorias) suelen ser el motivo por el cual las mujeres no quieren pasar por ello.
¿La alternativa? El rejuvenecimiento intraoral que realiza César Arroyo de la Clínica IO, que aborda la piel desde la mucosa labial. “Se aplica calor con un láser de erbio fraccionado por dentro del labio y de la cavidad oral y, a través de la mucosa, se estimula la producción de nuevo colágeno en la dermis, revirtiendo el envejecimiento de las arrugas peribucales y de las mejillas”, explica Arroyo. “Para completar el efecto podemos realizar tratamientos con el láser fraccionado en la superficie de la piel visible, pero ya con intensidades inferiores, evitando las complicaciones antes mencionadas”, añade este especialista.
– Se realiza en consulta, es prácticamente indoloro, no requiere periodos de recuperación, y se recomiendan de 4 a 6 sesiones, con un intervalo de un mes. 350 euros por sesión.
2. GRASA DE RODILLAS, FLANCOS, BRAZOS…
“Con el láser frío de baja intensidad Zerona se puede vaciar el contenido de las células grasas”, asegura la esteticienne Carmen Navarro (para este dispositivo no es necesario mano médica). “Su longitud de onda abre la pared del adipocito, mediante fotoquímica, y se liberan los ácidos grasos de su interior. Esa grasa la procesa el sistema linfático y la elimina del organismo mediante el mismo sistema que el de la pérdida de peso natural”. Es importante realizar de 20 a 30 minutos de ejercicio moderado –caminar, por ejemplo- el mismo día del tratamiento, para estimular el sistema linfático y, con ello, la eliminación de la grasa. Se consigue una reducción en todas las áreas del cuerpo (estudios clínicos demuestran una media de 9,1 cm. de circunferencia de caderas, cintura y muslos), pero es importante recalcar que lo hace también en zonas tan difíciles como rodillas o flancos, que se resisten a las dietas y ejercicio. ¿Esa grasa disuelta puede elevar los niveles de colesterol o triglicéridos? “No solo no se aumentan sino que se ha observado una reducción significativa tanto en el nivel de lípidos de baja densidad (LDL) como en el de colesterol. La FDA aprobó a Zerona específicamente para la reducción de circunferencia, constatando tanto su seguridad como eficacia”, asegura la esteticienne.
– Son necesarias 6 sesiones (completamente indoloras) de 40 minutos de duración, a lo largo de dos semanas consecutivas. “Tiene que ser cada dos días porque la investigación clínica demuestra que el poro creado por el láser Zerona permanece abierto de 24 a 72 horas”, puntualiza esta especialista. Los resultados comienzan a observarse a partir de la cuarta sesión. Para los pacientes con un índice de masa corporal (IMC) superior a 30 (obesidad) se recomiendan dos series consecutivas de 6 tratamientos. Precio: 60 euros la sesión.
3.REJUVENECIMIENTO ÍNTIMO.
“El efecto térmico de la luz láser se puede aplicar para contraer las fibras colágenas de la mucosa vaginal, disminuyendo el diámetro y longitud del canal, lo que produce un efecto tensor”, explican en la Clínica S&O de Madrid. “Esto proporciona no solo una mejora estética sino también funcional”, aseguran desde la clínica CETA. “Además de optimizar las sensaciones en las relaciones íntimas, se puede corregir la amplitud derivada de los partos y evitar el descenso del suelo pélvico, producir más mucosa vaginal…”. El láser provoca un tensado en la pared anterior de la vagina y ésta, por proximidad, refuerza la uretra, “por lo que se consigue controlar casi totalmente las pérdidas de orina”, añaden en la Clínica IO.
– Se realiza en consulta, no es doloroso (la sensación es similar a la de una citología en la que el manípulo desprende calor) y se requieren 2 o 3 sesiones, con un intervalo de 6 semanas. Alrededor de 990 euros (varía según el centro) el tratamiento completo.
4. RONQUIDOS.
El láser fotona permite al paciente recuperar un buen descanso nocturno (y, de paso, a su pareja). “Transmite calor en el tejido mucoso, sin quemarlo, provocando un tensado de la zona faríngea anterior, que es la que tienen dilatada los roncadores crónicos”, explica César Arroyo de la Clínica IO. “Se mejora el paso del aire a la hora de respirar y, de este modo, se consigue atenuar el volumen de los ronquidos y minimizar los efectos de la apnea del sueño”. …
– Es un tratamiento no doloroso, ambulatorio y muy duradero. Se necesitan tres sesiones, con un intervalo de dos tres semanas. 200 euros por sesión.
5. TATUAJES
¿Arrepentido de haberse hecho un “tatoo”? No hace mucho eran prácticamente imposibles de borrar, pero según los especialistas de Avanclinic de Madrid, el láser Q-Switched Nd:YAG permite lograr los mejores resultados. ¿Cómo se eliminan? Por medio de impactos muy potentes (decenas de millones de vatios) pero de muy poco tiempo (milésimas de millonésimas de segundo). “Si el pigmento que queremos eliminar tiene buena absorción por la longitud de onda del láser con el que estamos tratando, se producirá un efecto fotoacústico que lo fragmentará, y nuestro sistema linfático se ocupará de eliminar las partículas residuales, borrando así el tatuaje poco a poco”, señalan. “La eliminación de tatuajes es un tratamiento supeditado a la forma (profesional, amateur, cosmético, etc) y el color con el que ha sido realizado. El negro y el azul, y en general los colores oscuros son los primeros en desaparecer, mientras que las tintas rojas, amarillas y demás tonos claros requieren longitudes de onda inferiores, y por tanto pueden requerir más sesiones”.
En Ribe Clinic de Barcelona, utilizan el láser RevLite SI, “un Q-switched con tecnología fotoacústica, que lo que provoca es menor producción de calor y más seguridad” explica la Dra. Adriana Ribé, experta en láser. “Además tiene cuatro diferentes longitudes de onda que hacen posible que pueda eliminar prácticamente todos los colores”.
– Suelen ser necesarias entre seis y diez sesiones, con una frecuencia de entre cuatro y ocho semanas. 100-120 euros un tatuaje pequeño y 500 € uno grande, pero este precio varía mucho en función de los colores, extensión del tatuaje, y tipo de tatuaje.
6. DEJAR DE FUMAR
El láser puede tratar la dependencia física y la dependencia psicosocial. Es un diodo de baja potencia que eleva el nivel de endorfinas a niveles más altos que los producidos por el tabaco o la nicotina, y elimina la ansiedad. ¿En qué consiste la sesión? La doctora Elena Soria de la Clínica Menorca, explica que, tras una charla sobre objetivos y hábitos del paciente, éste se tumba en una camilla sin cruzar ni brazos ni piernas, y se relaja. El láser bioestimula a través de los veintiocho puntos vitales y energéticos el aparato respiratorio y el aparato digestivo (24 en la cabeza, 3 en el antebrazo derecho y 1 en el pecho) para regular el sueño, calmar la ansiedad y tratar la tristeza. “Durante el tratamiento no se aprecia ninguna sensación. Al terminar te sientes muy relajado, y a las pocas horas necesitas descansar porque induce al sueño”. La mayoría de los pacientes, descubren que no tienen más ganas de fumar (tienen un porcentaje de éxito del 80%).
– Se realiza en una sola sesión de una hora y, si es necesario, otra “de refuerzo” de 20 minutos, a los ocho días. El único requisito, estar sin fumar como mínimo tres horas antes de comenzar la primera sesión. Si en los siguientes 3 meses el paciente ha dado unas caladas, la doctora Soria realiza un refuerzo más. 300 euros la sesión.
PD: Este artículo lo escribí para ABC Salud del sábado 14 de Febrero, y lo reproduzco porque creo que os puede interesar también a los blogueros. No he probado estos tratamientos, me limito a transmitir una información que me parece interesante, y que me han proporcionad los especialistas.
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