Si hay alguna vara de medir con la que se va a juzgar a Ciudadanos esa es su apoyo a Susana Díaz para que sea investida presidenta de la Junta de Andalucía. En menudo lío se ha metido Albert Rivera, ya que, o saca la escoba y limpia de toda corrupción el cortijo socialista en esta Comunidad, o perderá toda credibilidad como líder de esa regeneración política que tanto proclama.
Y no será fácil, mañana mismo se puede encontrar con otra redada en la que se vean implicados ex cargos o dirigentes socialistas en esa telaraña que son los cursos de formación y el escándalo de los ERE. ¿Qué va a hacer? ¿Pedir la dimisión de la presidenta, de algún consejero o de toda la cúpula del PSOE?
Supongo que si no lo hace, o Susana Díaz le hace una pirula mirando para otro lado, le retirará su apoyo parlamentario y denunciará el incumplimiento de este documento de regeneración, entre otras cuestiones, que ambos firmaron.
Ya conozco a varios votantes de Ciudadanos que ahora se lamen las heridas que le han dejado la decisión de Ciudadanos de salvar al PSOE, después de protagonizar uno de los mayores escándalos de corrupción que se conocen en España. Pero era lo previsible.
Es la hora de la verdad, la de demostrar con hechos lo que se pregona por las tertulias y los programas de televisión.
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España Paloma Cervilla Garzónel