Sophia Loren vuelve a las pantallas a los 86 años. Los avanzados de Netflix saben que hay nichos de mercado que el viejo Hollywood deja escapar y lo aprovechan.
La iniciativa que devuelve a la potente, temperamental y bellísima Sofia Villani Scicolone a las pantallas la ha tomado su hijo pequeño, Edoardo Ponti, que intenta hacerse un hueco en el mundo de la cinematografía.
Con dos Óscar, un premio BAFTA y numerosos otros galardones, la valentía de esta actriz -presumida al máximo- es digna de halago por aparecer ahora en las pantallas, cuando lleva tiempo sin mostrarse al público, y menos sin una pila de maquillaje encima.
Pero es que Sofía Loren es una belleza con carácter, aún más atractiva e interesante con este estilismo burdo que con su habitual chapa y pintura de alfombra roja. Las imágenes del film revelan que incluso a los 86, está divina con peluca gris y arrugas.
Edoardo Ponti ha afirmado que su madre es “Un purasangre, y nunca ha tenido la oportunidad de protagonizar un rol en el que interpreta a una mujer que pierde la cabeza, como este”.
El film en Netflix, llamado en inglés The Life Ahead, O “La vida por delante”, refleja la vida de Momo, un niño huérfano senegalés de 12 años y de Madame Rosa, una judía superviviente del Holocausto que se ocupa de huérfanos de familias del mundo de la prostitución. La película estará disponible en Netflix el 13 de noviembre.
Aunque alguna prensa extranjera ha criticado la imagen de la actriz en silla de ruedas de camino al rodaje, hay que decir que -aparte de estar vestida para su rol- está fantástica y natural.
Preguntada por si está contenta con el rol, Sofía ha confesado que sería imposible hacer ya papeles de mujeres de 40 o 50 años, pero que confía en si misma y que se ha gustado.
La incansable mujer que ha conquistado a tantos fans durante décadas, no deja de confiar en su atractivo personal, probablmente encerrado en el interior de su privilegiada cabeza.