La casa del barrio de “Jamaica” de la familia de Trump, en el distrito de Queens de la ciudad de Nueva York, fue donde el magnate, ahora presidente, pasó su infancia y juventud. Ahora subastada por 2,1 millones de dólares, se trata en realidad de una casa en un barrio sencillo.
La población del barrio de Jamaica, en Queens, es en su mayoría actualmente afroamericana, hispana y asiática, aunque no siempre fue así.
En los siglos XIX y XX, la mayor parte de la población del barrio de Jamaica la constituían descendientes de inmigrantes irlandeses, algo que cambió en los años 50 y aún más en los 70, cuando bajó el precio de la vivienda y lo repoblaron salvadoreños, dominicanos e inmigrantes de Guayana y Surinam.
La casa, actualmente cotizada en 2,1 millones de dólares, tiene un precio muy superior a la media por haber sido el hogar del actual presidente de los Estados Unidos de América.
Es un edificio de estilo Tudor con fachada de estuco. Allí vivían los padres de Donald Trump cuando él nació en 1946. Tiene zona de chimenea, seis dormitorios, sótano y garaje para dos coches.
El comedor, la cocina y el office panelado con madera, completan una casa que compró en diciembre pasado un inversor por 1,4 millones de dólares, y que ahora ha puesto a la venta en subasta, vendiéndose por 2,14 millones de dólares.
La casa, que nada tiene que ver con la Torre Trump ni con la residencia de Florida de Trump, Mar-a-Lago, representa bien el estilo norteamericano de la época.
Quizás las imágenes de una casa típica en Estados Unidos, parecida a la de tantas familias y a las que salen en tantas series televisivas, unan a este presidente algo más a los estadounidenses.