ABC
| Registro
ABCABC de SevillaLa Voz de CádizABC
Blogs Columnas sin fuste por hughes

Pasotas con Crimea

hughes el

“Ninguna decisión de los separatistas será reconocida por el mundo civilizado”. Esta declaración del gobierno ucraniano (cualquier día le llamarán ucroniano), me parece tan españolizable, tan nuestra, que me asombra que no esté ya en las camisetas de la gente. Impresa. O en los tatús delpróximo verano constitucional. Cualquier día, un argumento de nacionalismo etnicista o de otro corte puede hacer volar las fronteras y la legalidad vigente. Con más o menos razones históricas y culturales. Lo de Putin vs Ucrania concierne tanto a España que me asombra que no estén las calles llenas. ¡Yo me echaría a la calle hoy mismo si tuviera con quién! No sé por qué nosotros, “el pueblo español”, “la ciudadanía”, Maidán de quita y pon, tan dados a salir a la calle a tocar la cacerola vivimos con tanto pasotismo algo así de grave y cercano. No hay tiros, claro, pero la violencia existe. ¿Por qué no nos duele Ucrania si nos ha dolido hasta la Cochinchina?

 

Los soldados sin bandera en Crimea parecen la soldadesca de Marta Sánchez, son los soldados sin batalla, soldados del amor de Putin.

Luego, hay otro tipo de gente que a mí la verdad es que me encanta, pero que me resulta muy paradójica, gente que se toma todo con gran seriedad y que luego  se ponen ligeros con las cosas importantes, ¡genios del contrahumor! Genios de la contraligereza. Señores de la mayor y mas inconmovible pesadez, de una pesadez genial, totémica, se ponen ligeros, ligerísimos con las cosas capitales.

Hablaba ayer con una persona ucraniana que me aseguraba que todo, lo del Maidán incluido, estaba preparado. No sé, no soy experto en política ucraniana, ya me cuesta decir ucraniana y no ucrania, pero lo que parece, y es un hecho que alguien podría corroborar, es que los altos mandos del ejército de Kiev eran de origen ruso y fueron nombrados, oh “corrutos”, a sabiendas. ¿Todo un orquestado paripé putinesco? No lo sé, pero Crimea parece uno de esos territorios por los que la Historia pasa una y otra vez, como un periódico seísmo, como un tifón. Hay zonas de especial sensibilidad. Pero está muy cerca Crimea. Europa es un bonito y a veces desquiciante puzzle con fundamentos legales. El argumento de que allí o allá hubiera rusos o rusoparlantes o adictos al vodka son formas intolerables de nacionalismo. Vamos, quevisto así hasta la costa catalana pudiera ser objetivo de Putin. Cargarse ese precario rompecabezas con criterios nacionalistas infectos. El pasotismo ciudadano al respecto no augura nada nuevo. El problema ya no es que Putin haga de esa zona del mundo su antepatio, el problema es que hubiera más Crimeas y  no tan lejos. ¡Hacer un  Crimea! ¡Hacer un Crimea por la vía de la ocupación y del hecho consumado!

Hay en el asunto un constante reproche a Europa. Un reproche que además pretende exculpar a Rusia de parte de su responsabilidad. Se dice, ah, no, pero es que Europa no juega su papel de potencia. ¿Pero y si no debiera jugarlo? Europa es un proyecto ciudadano, cívico. No un proyecto imperial. Ucrania, se nos dirá, es víctima de la indecisión entre una Europa sin poder y una Rusia de nuevo atractiva, magnética, militar. A veces se antoja impugnable ese argumento. ¿Por qué le pedimos a Europa de repente cosas que no puede hacer? Si Europa iba a ser la superación de todo eso… Tema espinoso, crucial.

Conceptualmente, el asunto es intolerable. Pero la peña pasa bastante y eso es curioso. ¿Es una causa de izquierdas o de derechas? Yo, por ejemplo, me voy a comer un cocido en cuanto cuelgue el texto, pero ando, la verdad, con la mosca detrás de la oreja.

actualidad
hughes el

Entradas más recientes