Los gigantes tecnológicos atraen a las masas y las marcas causan admiración, no hay más que ver a los seguidores de Apple, que hacen colas interminables por ser los primeros en probar sus productos. Ha llegado a un hasta tal punto, que ha creado un nuevo turismo tecnológico. Ayer mismo pasaba delante de la sede de Facebook en Palo Alto, y no cabía ni un sólo autobús más, lleno de grupos de turistas de todas las nacionalidades. Lo curioso, es que en realidad todo lo que pueden hacer es sacarse la foto delante del cartel, ya que la entrada al recinto está restringida. Aún y todo, para muchos, merece la pena obtener la instantánea delante del cartel de Facebook, como si se tratara de las pirámides de Giza.
Todo empezó con las Apple Store. Fue así, como la emblemática Apple Store de Nueva York se ha convertido en uno de los edificios más fotografiados de la gran manzana. Apple supo aprovechar la arquitectura y el diseño, con emplazamientos inmejorables para que su marca sea fruto de las visitas y las fotografías de los turistas de Nueva York.
Los emprendedores que han logrado esta magia de Silicon Valley, ya se han convertido en leyendas, como Bill Gates, Steve Jobs o Mark Zuckerberg, entre los más conocidos. Personas que, desde la nada, se convirtieron prácticamente con sus medios en millonarios en un corto espacio de tiempo. Modelos de iniciativa, innovación y emprendurismo, que ya superan a los de los brokers y yuppies trajeados de los 80/90.
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