Carmen de Carlos el 30 nov, 2009 Ni vencedores ni vencidos, las primeras palabras de un viejo guerrillero que hoy es presidente electo de Uruguay no podían ser otras. José Pepe Mujica está empeñado en demostrar al mundo que es un político en el que se puede confiar, un hombre de palabra y sin renegar de su pasado violento y de armas tomar- de bien. Mujica, de 74 años, instó a la unidad nacional en su primera intervención pública tras conocerse su victoria. También pidió perdón por si alguien se había sentido ofendido. Su discurso no fue revanchista, ni chavista, ni bolivariano, ni nada que suene a socialismo andino siglo XXI. Mujica, como Uruguay, es diferente. El próximo jefe del Estado tomará posesión de su cargo el 1 de marzo. Lucía Topolansky, su mujer, también es una ex guerrillera tupamara. Ducha en huir por las alcantarillas de la cárcel y asaltar bancos en los años 60, la señora fue la senadora más votada en las elecciones. Por esta razón será la encargada de tomar juramento en la ceremonia de investidura a su marido. En este rincón de América pasan estas cosas. Otros temas Tags lucíareconciliaci ntopolanskytupamaros Comentarios Carmen de Carlos el 30 nov, 2009