Antonio Cambronero el 28 feb, 2014 Cuando contratas un servicio de almacenamiento y ejecución de aplicaciones en un servidor, lo que habitualmente conocemos con el nombre de “hosting”, el proveedor te proporciona unos datos, normalmente mediante una comunicación por e-mail. En este artículo te aclararemos cuáles son esos datos y su significado. Evidentemente, la forma concreta de comunicar esos datos difiere dependiendo de cada proveedor. A continuación veremos la información más importante que necesitas para empezar a trabajar (por ejemplo, instalar el sistema de publicación de blogs WordPress) en un hosting compartido. Si el hosting es a través de un servidor dedicado, VPS o cloud hosting (en la nube), lo que viene a continuación puede sufrir variaciones. Generalmente, al contratar un hosting compartido, tienes dos alternativas: Registrar también el nombre de dominio. Esta opción no es recomendable, ya que es mejor tener separado, por flexibilidad y seguridad, ambos elementos en distintos proveedores. Solo el hosting. Con esta opción necesitas apuntar el nombre de dominio hacia el servidor donde tienes alojado el blog. Pero, en ambos casos, antes de empezar, debes asociar tu hosting a un dominio principal, aunque posteriormente, y si el proveedor lo admite, puedas dar de alta más dominios y realizar instalaciones de WordPress adicionales. Dirección IP del servidor La dirección IP del servidor es el identificativo único en Internet, correspondiente a la máquina física que vas a utilizar. Se trata de una ristra de dígitos, del tipo xxx.xxx.xxx.xxx. Al final, lo normal es que a tu blog se acceda mediante un nombre de dominio (del estilo midominio.com) y ni tú ni tus visitantes vais a emplear directamente la dirección IP. Sin embargo, si vas a trasladar tu blog de un servidor a otro, una forma de hacerlo es preparar el nuevo entorno mientras que sigue funcionando el que vas a abandonar. Y, en ese caso, algunos proveedores permiten el acceso mediante la dirección IP. Eso facilitaría, por ejemplo, acceder al panel de administración de WordPress, en el nuevo servidor, sin utilizar el nombre de dominio (que todavía apunta al servidor antiguo). Otros proveedores proporcionan una URL temporal, que es posible utilizar hasta que dirijas el nombre de dominio al nuevo servidor. Sobre qué es un dominio, cómo se registra y cuál es la forma de dirigirlo a tu blog, te invito a leer el artículo que publicamos, aquí en Weblog Magazine. Datos FTP Los datos de FTP te servirán para transferir y editar archivos de tu espacio de hosting, mediante cualquier aplicación preparada para ello, bien online o instalada en tu ordenador. Tener habilitado el FTP es muy útil porque accedes a tu servidor sin utilizar el navegador y, en muchos casos, es más flexible. Por ejemplo, puedes modificar los permisos de un archivo o cambiar la configuración de WordPress, fácil y rápidamente. Para habilitar la actualización de themes y plugins en WordPress, desde su panel de administración, también debes conocer los datos de FTP. Los datos de FTP se componen de: Nombre del servidor FTP. El nombre del servidor puede coincidir con la dirección IP del servidor o ser del estilo “ftp.midominio.com” o, incluso, “midominio.com”. Naturalmente, hasta que no tienes conectado tu nombre de dominio con el servidor (ver apartado “Direccionamiento DNS”, más adelante), no puedes emplear nada más que un nombre de servidor FTP en forma de dirección IP. Usuario y contraseña. Son tus credenciales para acceder por FTP al servidor. Panel de control El panel de control es la pieza fundamental para gestionar tu hosting porque proporciona, de forma ordenada y sencilla, todas las herramientas necesarias. El sistema más generalizado y fácil de utilizar, es CPanel. Para acceder al panel de control necesitas conocer la URL, el usuario y la contraseña. Lo normal es que la URL sea del estilo “midominio.com/cpanel” pero también se suele facilitar una dirección temporal para poder acceder mientras todavía no se haya dirigido el nombre del dominio al servidor. El panel de control, debe contener, al menos, las siguientes herramientas: Administrador de archivos. Aunque el FTP es muy útil, disponer de una aplicación de gestión de archivos online, también es necesario porque, en algunos casos, es más rápido. Sin ir más lejos, la carga del software de WordPress es mejor hacerla subiendo el zip, y descomprimiendo éste desde el administrador de archivos del panel de control. Creación de bases de datos mysql. Para instalar WordPress, manualmente, es preciso crear la base de datos mysql. Gestión de bases de datos mysql con phpmyadmin. Una vez instalado WordPress, la herramienta phpmyadmin te facilitará la labor de optimización de la base de datos y recuperación de la misma en caso de desastre. También es útil en caso de traslado del blog de un servidor a otro, para restaurar la base de datos. Gestión avanzada de DNS. El funcionamiento del direccionamiento DNS se puede configurar desde esta herramienta. Por ejemplo, si quieres que se acceda a tu blog con “www” o sin ella, en la URL, siempre y cuando el hosting no establezca por defecto dicha opción. Instalación de WordPress. Si aprendes a llevarla a cabo, la instalación manual de WordPress no es nada complicada. Sin embargo, es útil disponer de un asistente con el fin de realizar la instalación mediante un clic. Direccionamiento DNS Este es un dato importante porque te permitirá diferenciar el registro del nombre del dominio de la contratación del hosting, algo fundamental si queremos evitar problemas a la hora de mover nuestro blog de servidor. Lo que coloquialmente se denomina “las DNS” no son nada más que las direcciones IP por las que se llega a las máquinas que contienen nuestro blog. Suelen ser dos, aunque, en algunos casos, se proporcionan tres. La principal, normalmente coincide con la dirección IP del servidor (el dato visto anteriormente). Sin embargo, lo que suelen admitir casi todos los proveedores del servicio de registro de dominios, son los denominados “name server” (servidor de nombre): una especie de nombre de dominio correspondiente a cada una de las direcciones IP. En algunos proveedores de registro de dominio (donde debes realizar la dirección hacia el servidor que aloja el blog) se requiere configurar tanto el valor del “name server” como el de su dirección IP correspondiente. Por ello, debes solicitar ambos, ya que lo habitual es que se te envíe solo los “name server”. Existen Webs que te informan de las direcciones IP de un determinado “name server” pero es preferible que sea tu proveedor de hosting quien te aporte dicha información. bloggingInternet Tags hosting Comentarios Antonio Cambronero el 28 feb, 2014