Los resultados no acompañan al Real Madrid en la Liga y los dirigentes del club manienen un halo de tranquilidad ante la crisis. ES cuando peor van las cosas cuando Florentino Pérez y sus colaboradores mantienen más que nunca la calma. Malo es el dirigente que cuando las cosas van mal habla y caldea todavía más el ambiente para justificar su situación. En el fútbol español ya lo hemos visto demasiadas veces:dirigentes que para tapar sus errores hablan y señalan al entrenador o a los jugadores como los culpables.
Florentino Pérez nunca ha actuado así. Sabe que los jugadores y los entrenadores hacen todo lo posible por ganar siempre unas veces se consigue y otras no. Tiene mucha experiencia. Tiene muy claro que cuando las cosas van mal no hay que hablar y trabajar. Ofrece una imagen de unión que es cierta. Muestra su apoyo al entrenador y a los jugadores porque asume que el problema es producto de una temporada en la que se han mezclado 16 lesiones que han llevado al equipo a una situación complicada. Keylor, Ramos, Vallejo, Bale y Benzema han sido baja en dos ocasiones. Kovacic estuvo tres meses sin poder competir. Cristano soportó conco partidos de sanción.
El presidente y la dirección deportiva analizan que ningún gran equipo aguantaría que medio equipo titular se hubiera roto dos veces en seis meses. Así no es fácil mantener un once titular y el ritmo de competición que tantos triunfos aportaron en otras ocasiones. El Real Madrid aguantaba bien que hubiera dos o tres jugadores en baja forma o en proceso de recuperación. El resto del equipo respondía. Lo malo de esta temporada es que sean sufrido a la vez muchas bajas y procesos de recuperación coincidentes. Eso no hay campeón que lo soporte. A pesar de todo, Florentino Pérez ha mantenido la serenidad y la calma. Ahora espera que los jugadores den el do de pecho ante el PSG. La Champions va a ser el gran examen final de esta campaña. La Copa de Europa puede cambiar el destino del csmpeón. Ese es el reto que tienen ahora Zodane y sus secuaces. El presidente pide al entrenador y a los futbolistas que mantengan la unidad con el fin de atacar al PSG y la Champions con la experiencia y la entrega que siempre han demostrado en esta competición. Zidane y Ramos manifiestan que es hora de hablar menos y hacer más. Es la hora.
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