Teresa de la Cierva el 23 ene, 2009 El botox es mágico para borrar arrugas y quitarte años de un pinchazo. Pero, cuando está mal inyectado puede salirte el tiro por la culata. La buena noticia es que todos los “errores” tienen solución. Si eres una de las afectadas, sigue leyendo porque el doctor Ricardo Ruiz, uno de los médicos que mejor infiltran esta toxina en España, es capaz de devolverte la expresión de tu cara. -“SE ME HA CAÍDO EL PÁRPADO” Este es uno de los problemas más comunes si te pinchan en la zona del entrecejo (se da en un 3% de los pacientes, y sobre todo en mayores de 50 años). Sucede cuando la toxina se difunde desde la zona tratada hasta los músculos elevadores del párpado, y puede durar varias semanas. SOLUCIÓN: Se aplica un colirio de apraclonidina que eleva al momento el párpado. -“SE ME HAN QUEDADO LAS CEJAS COMO LAS DE JACK NICHOLSON EN BATMAN” Puede pasar que se suba una (o las dos) cejas en su parte central, que quede en pico. En opinión de Ricardo Ruiz, para que esto no suceda no se debe infiltrar botox en la parte central de la frente (que es lo que hacen muchos para elevar las cejas). La infiltración óptima sería en los laterales del músculo frontalis y en las patas de gallo superiores. Esta última es la que provoca la elevación de las colas de las cejas. SOLUCIÓN: Estas asimetrías se corrigen fácilmente con nuevas infiltraciones en los puntos anatómicos adecuados. -“SE ME HA TORCIDO LA BOCA” Cuando se inyecta una cantidad excesiva de toxina botulínica en el tercio inferior del rostro o la infiltración se ha hecho a nivel muy profundo puede pasar que esta “migre” hacia la boca, que es donde se concentran todos los músculos de ese tercio inferior. SOLUCIÓN: Los músculos que se han contraído en exceso pueden relajarse inyectando la toxina de manera compensatoria. -“ME DUELE LA CABEZA” A un 3% de los pacientes tratados con toxina botulínica les duele la cabeza durante las doce horas posteriores a las infiltraciones. La razón exacta se desconoce aunque, paradójicamente, el botox se ha revelado recientemente como un eficaz fármaco contra las migrañas. SOLUCIÓN: Se controla con paracetamol y desaparece espontáneamente. – “ME HAN SALIDO MÁS BOLSAS EN LOS OJOS DE LAS QUE TENÍA” Esto pasa por un acumulo de líquido (edema). Y suele darse cuando el médico realiza infiltraciones en las patas de gallo que se encuentran por debajo de la línea orbicular (y el producto se extiende hacia el contorno de ojos). SOLUCIÓN: Hay que dormir con la cabeza más elevada que el cuerpo, y hacerse un drenaje linfático en las bolsas para eliminar el líquido acumulado. -“SONRÍO RARO” Si te inyectan demasiada cantidad de toxina botulínica en las patas de gallo pueden quedar afectados los músculos del pómulo, y se pierde volumen en la mejilla, lo que provoca un efecto poco natural al sonreír. SOLUCIÓN: Se aplica ácido hialurónico para dar volumen a los pómulos. – “ME CUESTA TRAGAR” o “TENGO LOS OJOS SECOS” Después de haberse sometido a infiltraciones en el cuello, algunos pacientes se quejan de cierta dificultad para tragar. Otros, después de haber sido tratados de la zona orbicular, protestan por la sensación de ojos secos (esto es por el efecto neutralizador que tiene el bótox sobre las glándulas sudoríparas). SOLUCIÓN: Ni uno ni otro tienen solución, pero ambos desaparecen naturalmente en pocos días. DÓNDE: Dr. Ricardo Ruiz Rodríguez, Clínica Dermatológica Internacional. C/General Díaz Porlier, 93. Tel: 91.4449797. www.skinlogic.es Tratamientos Comentarios Teresa de la Cierva el 23 ene, 2009