¿Después de tantos días de reclusión están empezando a asomar las canas o la raíz oscura? Tranquilas. ¡Le pasa hasta a Kate Moss! Pero como apuntan los psicólogos, en estos días de confinamiento es importante mantener un buen aspecto físico porque ello influye de manera notable en la gestión de las emociones.
De modo que nos va a tocar tirar de los tintes del supermercado. Pero si nunca lo habéis hecho, no es tan fácil como parece. La peluquera Noelia Jimenez advierte de que la mayoría de las veces el resultado no coincide con el tono que aparece en la caja, y conseguiremos un color diferente en la raíz y en las puntas. Y si lo que estamos buscando es ocultar las canas, ojo que podemos teñir una franja de pelo mayor de la necesaria y que se acabe creando una especie de diadema de un color más intenso que el resto de la melena. Esta especialista alerta de que, si no sois consumidoras habituales de coloración casera, no os dejéis llevar por el aburrimiento y dediquéis el exceso de tiempo libre a experimentar con decoloraciones y cambios de tono porque pueden suponer verdaderos crímenes para nuestro pelo. “No todos los colores quedan bien a todo el mundo. Es importante tener en cuenta el tono de piel, de ojos y el color natural del cabello”. Por eso, también Eduardo Sánchez, director de Maison Eduardo Sánchez recomienda olvidarse de experimentos y ceñirse a retocar la línea de la raíz, porque si el resultado no es el deseado, será más fácil arreglarlo después en el salón. Y me ha encantado el detallazo que ha tenido Diana Daureo, que va a enviar a cada una de sus clientas el tinte que les aplica en su salón para que se retoquen con él, y no haya lugar a errores de color. Bravo.
Pero allá vamos con los consejos de Eduardo Sánchez para hacerlo lo mejor posible:
1. Haceos la prueba de alergia. El fabricante suele especificarlo pero es muy importante cumplirlo a rajatabla si nunca os habéis teñido en casa. Empezad por probar la fórmula en un mechón en la zona de la nuca y dejadlo actuar. No sólo descartaréis una reacción alérgica, también podrás ver como va a quedar el color.
2. Mejor con el pelo sucio. Es preferible que el pelo no se haya lavado ese día por dos motivos, porque el cabello limpio hace que el tinte “agarre” menos y porque el pelo es más sensible a posibles irritaciones.
3. Teñíos con ropa vieja y una toalla por los hombros que no os importe manchar, y poneos siempre los guantes que suelen ir incluidos, porque podéis teñiros la piel ¡y las uñas!
4. Protegeos la piel del rostro (contorno, orejas, cuello y nuca) con vaselina o alguna crema grasa para evitar manchas o irritación en la piel.
5. Elegid siempre un tono más claro que el vuestro porque una vez aplicado, suele ser más oscuro de lo que parecía en la carta de color. Y ojo, los tonos más claros suelen corresponder a un tono numéricamente superior. Es decir, si vuestro tono es el 8 (mi caso), tendréis que elegir un 9.
6. Seguid estrictamente los tiempos de exposición que marca el fabricante. Se suele pensar, erróneamente, que dejándolo más tiempo cubrirá más, pero no es así. Pasado el tiempo que marca el fabricante lavaos el pelo porque el tinte deja de hacer efecto y lo único que conseguiréis es irritar más el cuero cabelludo.
7. Aclaraos el pelo hasta que el agua salga clara para aseguraros de no quedan restos de pigmentos. Y terminad con agua tibia o fría ayudar a que el color se asiente.
8. Aplicaos una mascarilla de medios a puntas extendiéndola bien con la ayuda de un peine de púas anchas para hidratar el pelo que las coloraciones lo resecan.
9. Y no os asustéis si el color del primer día no es el que esperabais. El definitivo se aprecia transcurridos un par de días, cuando los pigmentos se van matizando.
10. ¿No os atrevéis con todo esto? Este consejo es mío que soy usuaria habitual: recurrid a los sprays cubre raíces y canas al instante como Magic Retouch de L’Oreal Paris o Schwarzkopf Root Retorcer. Son como un “maquillaje” para el pelo, y un “parche” temporal porque su efecto desaparece con lavado, pero os ayudarán a mantener el pelo “digno” hasta que podáis salir corriendo todas a la peluquería (antes de que existieran, yo he llegado a ponerme betún liquido de zapatos, del de que tiene esponjita!!!). Y una advertencia: a la hora de comprarlo, tened en cuenta que su resultado es un poco más oscuro que el color de la imagen que aparece en el envase.
Y si solo asoman ligeramente algunos pelos blancos, probad este cepillo Magic Retouch, que es como una máscara de pestañas, y el retoque es mas preciso que con el spray que “embarra” un poco más más.
Con todo esto, no tenéis excusa para que vuestro pelo no esté en perfecto estado de revista.
¡Felices, y retocados, días de reclusión!
#quedateencasa
Pelo